“La recuperación del transporte ferroviario no contaba con mucho material. La provincia está recuperando todo lo que es la parte de vías a través del desmalezado, de durmientes, de rieles, haciendo fijaciones pero el trabajo es un poco lento”, expresó.
El trabajo se realiza en forma manual, mediante la intervención de cuadrillas, cuando en la actualidad el trabajo de mantenimiento de vías se hace en forma totalmente mecanizada. Por ello, en la Unión Ferroviaria sabían que se iba a contratar a una empresa para que se encargue del trabajo pero hasta el momento no pudieron confirmarlo. “Debido al abandono la maleza le ganó a las vías y en algunos tramos hay árboles”, aseguró.
El ramal Paraná-Basavilbaso-Concordia “está bastante bien porque ALL (América Latina Logística) ya la había hecho algún mantenimiento”. De todas formas, los trenes circulan a escasa velocidad: el de cargas a 20 o 30 km/h y el de pasajeros a 50 o 60 km/h. Cuando los trenes estaban en poder del Estado, circulaban a 90 km/h.
Fernández aseguró que el tramo Paraná-Federal-Curuzú Cuatiá pertenece a una segunda etapa. En muchos lugares de ese ramal hay que renovar por completo las vías, ya sea los durmientes o los rieles. En otros tramos ya no quedan raíles porque fueron extraídos. “Se necesita una inversión bastante grande”, precisó.
“Si hoy la Presidenta hizo ese anuncio, bienvenido sea”, dijo Fernández. Como dirigente gremial, indicó que apoyan la iniciativa porque significa “reabrir fuentes de trabajo que es lo que se necesita”.