El presidente ruso, Vladimir Putin, por su parte, ratificó el reclamo de un alto el fuego permanente, como condición para iniciar negociaciones entre las autoridades en Kiev y los representantes de las regiones del sudeste de Ucrania, a pesar de que en la noche del jueves al viernes se volvieron a registrar algunos combates en diferentes regiones.
El Consejo de Seguridad Nacional, con asiento en Kiev, informó que en Kramatorsk murieron cinco soldados y cuatro resultaron heridos durante un enfrentamiento con los rebeldes. En Donetsk, grupos separatistas ocuparon una base de la guardia nacional tras un tiroteo de casi siete horas, provocando varios heridos. Por último, el ministro del Interior, Arsen Avakov, confirmó que cerca del bastión separatista de Slaviansk, unidades del gobierno destruyeron un tanque de combate de los prorrusos.
En tanto, los jefes de Estado y gobierno de la Unión Europea (UE), reunidos en Bruselas, dieron un ultimátum de 72 horas a Rusia, hasta el lunes, para que actúe para distender la situación si no quiere enfrentarse a nuevas sanciones, al tiempo que firmaron el acuerdo de cooperación económica y política con Kiev, que produjo el levantamiento separatista.