La responsable del museo recalcó el hecho de que se haya tomado la “decisión política” de recuperar el inmueble, cuestión que antes no sucedió. Además, el año pasado personal entendido en restauraciones pasó por el palacio, revisó el estado de paredes, techos, puertas y ventanas. Es otro dato que la responsable del museo no dejó pasar por alto. “Han venido expertos para hacer los planos. Eso quiere decir que hay un tratamiento serio respecto de lo que se quiere realizar acá. Antes no sucedió”, dijo.
“Estamos esperando”, dijo Blanche. La directora supuso que la obra está presupuestada y que se realizarán las inversiones. “Sé que están preparándose las licitaciones pero no se me ha comunicado fehacientemente en que tiempo se va a publicar eso”, añadió.
El edificio tiene deterioros importantes en la planta principal y en el piso superior. A las salas principales ingresa agua de lluvia y se han producido derrumbes de los cielorrasos de yeso por la humedad que absorben. La directora está preocupada por lo que pueda suceder a corto plazo si no se atiende esa situación.
“Hemos pedido durante años que esto suceda porque el edificio tiene serios deterioros que si no se atienden a futuro no puedo garantizar nada”, explicó. Hace más de una década que están reclamando la restauración. “Hubo unos cuantos trámites y unos cuantos anuncios respecto de la puesta en valor del edificio”, indicó Blanche. No obstante, las gestiones naufragaron entre la burocracia estatal y la falta de presupuesto para cuestiones culturales.
Durante el transcurso del tiempo, se hicieron algunas demoliciones y reparaciones parciales pero resultaron medidas inocuas. “No hacen en realidad a lo que el edificio necesita”, acotó la directora del museo.
La restauración debe comenzar por el techo y la terraza, las aberturas, las instalaciones eléctricas, de agua y gas. “Son urgentes”, recalcó. En la parte superior, no hay energía eléctrica ni agua y, además, el acceso está cerrado al público para evitar que alguien se lastime con un desprendimiento de yeso.
Por otra parte, la responsable del museo explicó que el reclamo de la restauración es compartida por la comunidad. En efecto, en un libro de visitas que está abierto desde 2008 a los turistas, los agradecimientos en muchos casos comparten las páginas con exhortaciones a las autoridades de hacerse cargo de la recuperación del edificio.
En tanto, Blanche aseguró que la comisión de protección patrimonial le notificó en estos días sobre la colocación de una placa en el Palacio. La distinción apunta a declararlo de interés patrimonial. De todas formas, el edificio fue declarado de interés cultural por decreto de la Presidencia de la Nación. La directora valoró la decisión de la comisión para futuros trámites. “Digo para conseguir fondos para alguna que otra cosa”, explicó.