Mientras el gobierno y el campo no se ponen de acuerdo por si la ganancia de los sojeros tiene que ser un poco más o un poco menos, los precios de la canasta básica de alimentos se dispararon y está mandando a la pobreza a millones de personas. O sea, mientras se discute si el que planta soja debe quedarse con un trozo mayor de la torta o si, en cambio, esa diferencia se la debe quedar el gobierno, en el mundo hay crisis de alimentos y por tanto, los precios se dispararon. Aquí también. O sea, lo que a nosotros hace algunos años nos sobraba y nos podría seguir sobrando…si nos pusiéramos de acuerdo, claro, en el mundo falta: los alimentos. Lo que cuenta es que ya se comenzó a comentar que el dólar se puede disparar a $ 3,50 y muchos tienen deudas en dólares o en pesos atados a esa moneda y produce pánico, porque así se empieza. Lo que cuenta es que quien estaba pensando adquirir un crédito para emprender un negocio, sale disparado porque se le vienen todas las imágenes del país bananero e imprevisible. Eso es lo que cuenta. Cuenta que parece que nos hubiéramos cansado de 5 y casi 6 años de bonanza económica y de crecer en forma ininterrumpida al 9 % anual ¿ gracias a quien? Ponga Ud. al sector que prefriera, las buenas políticas de gobierno, el campo, la industria, el dólar caro, la salida de la convertibilidad, lo que se le ocurra, pero no se olvide que, en cualquier caso, sin el esfuerzo compartido de cada uno de nosotros, nada de esta recuperación fabulosa que hemos logrado hubiese sido posible. O sea, llegamos aquí gracias al esfuerzo de todos y a creer que podíamos.
Releo lo que escribo y me digo que entender esta situación es de una sencillez casi elemental ¿ y entonces?
Entonces creo que ya ni siquiera es posible decir que la puja es entre el campo y el gobierno. Así fue al principio, ahora es mucho más que eso, aunque se podría resolver ahí, excede a los contendientes en cuanto a la dimensión adquirida. Buzzi de la Federación Agraria debería tener conciencia de esto y también la presidente CFK.
El problema, es que en esta puja se montan todos los que tienen algo para cobrarle al gobierno, por derecha y por izquierda y, como ha ocurrido tantas veces, hay quienes se montan sin el más mínimo sentido de la responsabilidad.
Frente a esto, entonces, uno piensa que alguien tendría que parar la pelota, alguien debería dar cuenta de que se está ingresando en una espiral peligrosa. Y nosotros, la sociedad, obligar a que sea así, no alimentar artificialmente la confrontación, ni repetir cosas que no nos constan. No se puede decir o repetir alegremente que fue el gobierno el que produjo la quema de pastizales. Hasta que no haya pruebas de otra cosa, es una MALA práctica de los dueños o arrendatarios de esa zona. Hasta ahora es eso y eso no implica que quienes habitualmente lo hacen hayan evaluado este inmenso daño. Pero hasta ahora y no para demonizar, es ahí donde se produjo. No ayuda, sostener sin pruebas, lo otro. Tampoco ayuda que Romina Picolotti salga a afirmar la barbaridad de hoy y que fuera desmentida en DIARIOJUNIO cuando señaló que mientras ella apagaba el fuego en un lado, en otro había irresponsables productores que provocaban incendios. Nada que ver, al contrario, estaban intentando sacar agua de un lado para llevarla al otro. Eso no es error, es mala fe. Es querer salirse con la suya al precio de mentir, de decir cosas absolutamente falsas. Pero ni siquiera esto es lo peor, lo peor es que la sociedad o sea nosotros, repetimos tal o cual cosa, no en base a lo que se acerca más a la verdad sino a si está más o menos cerca de la posición que hemos adoptado frente al conflicto y así la bola se agranda de un modo increíble. Decidimos participar de este conflicto y no se si lo estamos haciendo bien.
Observe si esto que le digo no es assí… si está con el gobierno sale a repetir lo de Picolotti y si nuestro diario descubre la mentira, entonces estamos pagos por la oligarquía terrateniente. Si por el contrario, Ud. está en contra del gobierno y a nosotros en este diario se nos ocurre decir que hasta que no se demuestre lo contrario, el fuego y las quemas, se produjeron en esos campos y ahí hay que buscar a los responsables, entonces estamos pagados por el gobierno. Y así, estimados lectores, no se enriquece la democracia, así lo que se logra es la guerra de todos contra todos y cuando se pudra todo que se haga cargo Dios. Ahí esta al diferencia entre la responsabilidad ciudadana y el individualismo más cerril.
Uds. y yo sabemos que los argentinos somos difíciles, que somos capaces de quemarle los papeles al más pintado de los teóricos, por eso mismo, hemos pasado de las posiciones y posturas más desastrosas para el país hasta las mejores. Por ejemplo esta sociedad es la misma que hizo la vista gorda en el golpe más sangriento y la que salió a la calle a defender a Alfonsín frente al carapintadismo. O sea, complicados.
Ahora, en este momento podría ser la ocasión y por suerte aún estamos a tiempo, de ser la contracara del país del caos, de la hiperinflación, endeudados hasta la cabeza con créditos que solo sirvieron a los banqueros que se enriquecían (Martínez de Hoz) o al país que regalaba su patrimonio social (Menem) vendiendo a precio vil, nuestras riquezas.
Escribo esta nota porque tengo dudas que podamos demostrar que aprendimos.
Apunte lo que siento y con el cuidado de no ingresar en lo que se define como chicana en cuanto a las denuncias de supuestos sectores golpistas que merodean los escenarios, sino a partir de un interrogante de puro sentido común me pregunto y lo insto a Ud. a hacer lo mismo ¿ cómo y donde termina esto ?. dejemos de pensar en abstracto, vayamos a lo concreto e imaginemos el escenario que le sigue a este estado de cosas: el gobierno no cede, el campo vuelve a cortar las rutas, desabastece, los sectores más variados se montan en ese estado de cosas para cobrar actuales y viejas deudas y comienzan a pasar los días. Empiezan a escasear los alimentos, los vivos de siempre inician los acopios para cuando no haya más venderlos al doble, los camioneros rojos de furia por los días que pierden, el gobierno se desespera, los grupos más jugados arman contrapiquetes, De Angelis y los suyos con escopetas y carabinas…¿ es exagerado lo que pienso en voz alta?
Me detengo aquí, siga Ud. si quiere, ¿cae el gobierno? ¿y? quien subiría de acuerdo a su parecer, Duhalde, Carrió, los radicales, ¿Quién? y para hacer que? Este es el punto ¿para hacer qué? siempre en situaciones de crisis hay ganadores y perdedores y, los que ganan y pierden son siempre los mismos, no necesito decirle que, nuevamente vamos a perder Uds. lectores (la mayoría por lo menos) y nosotros.
Pero además, permítame recordarle esto que también es elemental apreciarlo. Vayamos al otro escenario, el gobierno cede y los sojeros y Cía. No pagarán las retenciones que el gobierno quiere cobrarles. Ganan la pelea, la disputa. ¿ cual es el mensaje ? y que viene después de eso.
Nadie puede discutir la legitimidad de este gobierno, ganó las elecciones de un modo limpio y hasta que se demuestre lo contrario (o sea nuevas elecciones) conserva toda la legitimidad. En un sistema democrático, un gobierno así tiene la habilitación social para adoptar medidas de gobierno.
Bien, las adopta (como de hecho lo hizo), pero a un grupo (de muchos, pocos, o lo que sea), no le gusta. Entonces, manu militari cortan ruta, desabastecen, generan caos y consiguen lo que reclama. ¿ esta bien que sea así? se lo pregunto a los efectos de reflexionar juntos. En realidad, sabemos cuantos son los que apoyan a los piqueteros? Y si fueran apenas una minoría, si resultara que, el gobierno llama a elecciones o a un plebiscito y una mayoría señala que el gobierno está haciendo bien las cosas ¿Qué diríamos? Tendríamos que aceptarlo verdad. Y entonces… pregunto, si no hubiera acuerdo, no sería una buena medida que todos salgamos a pedir un plebiscito sobre si estamos de acuerdo con una u otra política y así evitar los golpes de efecto, de mercado de prensa y somos NOSOTROS, el pueblo, la sociedad, los dueños verdaderos de este país, los que decidimos y así no permitimos como ha ocurrido tantas veces que sean otros los que decidan por nosotros.