Prigioni especificó que en la publicidad en la calle se dispusieron “17.000 pesos para el pago de los 9.000 afiches”. Ante la crítica de la oposición, admitió que parece mayor porque se concentró en poco tiempo. “Se trata de una inversión publicitaria de 250 mil pesos que se volcó en apenas 30 días; por eso se notó tanto. En simultáneo con la vía pública la escuchás en radio y la ves en TV. Eso da una sensación de que la publicidad abruma”, comentó.
En ese sentido, comparó que en la Dirección a su cargo se dispendia mensualmente entre 60 y 70 mil pesos en publicidad de difusión de obras de gobierno. Luego recordó que la publicidad de la consulta es un requisito que se le exigió desde la Cámara Nacional Electoral a fin de evitar la confusión del electorado con la elección de diputados que se realiza en simultáneo.
La decisión política de convocar a una consulta popular implica que el Estado provincial se haga cargo de los gastos del día del comicio. En principio, desde el gobierno se decía que de la logística se encargaría el ministerio del Interior, pero, según explicó a el secretario de Justicia, José Carlos Halle, los gastos son repartidos entre la cartera que controla Aníbal Fernández y el gobierno de Entre Ríos.
La provincia aportará 900 mil sobres verdes que se usarán; la impresión de los tres millones de boletas (sumadas las del Si y las del No) y del resto de la papelería: instructivos para autoridades de mesa, fajas para las urnas, afiches para pegar en los lugares de votación con indicaciones para los electores y dentro del cuarto oscuro para señalar la ubicación de las boletas.
El gasto de impresión fue doble ya que debieron a volverse a confeccionar luego del último fallo de la Cámara Electoral que permite al presidente de mesa interrogar al elector si quiere participar de la consulta.