Trascendió que el muchacho, de 20 años, vivía en Gervasio Méndez y San Vicente de Paul y sería el hermano de la joven que está acusada de matar a Mario Farabello en el mes de julio pasado y que por disposición judicial, volvió a vivir en su casa, situada precisamente en el escenario barrial de la muerte de Bruno Rodríguez.
Al estar involucrado personal policial, cuatro Suboficiales y dos Oficiales, responsables de Comando y Operaciones, respectivamente, se solicitó la colaboración de la División Criminalística e Investigaciones del Escuadrón 56 de Gendarmería Nacional, para la realización de las distintas pericias.
De esa manera, se secuestraron dos vehículos policiales, un automóvil Chevrolet Aveo y una camioneta Ford Ranger, que resultaron seriamente dañados por balas y piedras; las armas de los seis efectivos policiales y la que portaba el joven fallecido.
Actuaron en el lugar la Fiscal en turno, Carolina Costa y el Coordinador de Fiscales, Mauricio Derudi, quienes dispusieron el traslado del cadáver de Rodríguez a la morgue judicial del Cementerio Norte, donde estaba prevista la realización de la autopsia.
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