Los datos recolectados por los pesquisas de la Cuna de la Bandera, dan la posibilidad concreta de que el entrerriano haya sido marcado a la salida de la zona financiera de Rosario, lo que continuó con un seguimiento de los dos delincuentes en una motocicleta que produjeron el grave hecho en cercanías de la terminal de ómnibus, publicó diario Uno.
El recorrido de la Toyota Hilux modelo 2010 se inició desde un estacionamiento de calle Paraguay, casi Córdoba, una zona donde existen casas cambiarias y entidades financieras y económicas importantes de la ciudad.
En la mañana del miércoles Bereciartu, de 52 años, acompañado por Juan Pablo Baggio, de 25, llegaron desde Gualeguaychú con el fin de realizar distintos trámites.
A las 14 la camioneta salió del centro y fue interceptada por los delincuentes, que intentaron asaltarlo. Por eso se está investigando qué fue lo que realmente querían robar los delincuentes, ya Baggio aseguró que solo intentaron robarles una campera y contó que estaban paseando por la ciudad y que en ese momento se dirigían a la zona de shopping.
Los investigadores quieren saber si en el rodado había dinero o fueron a llevar efectivo a una entidad financiera, lo que llevó a que fueran perseguidos desde el centro.
Se trata de verificar las imágenes de una cámara de seguridad para tener un mejor panorama, pero hasta ayer no había datos concretos de los dos delincuentes. Se sabe que el ocupante de la parte trasera de la moto se bajó y rompió la ventanilla del lado del conductor, quien habría forcejeado con el delincuente. En esa circunstancia, el agresor efectuó un disparo que perforó el techo de la camioneta y, tras otro forcejeo, volvió a disparar, pero esta vez la bala impactó en la axila del conductor. Luego los jóvenes se dieron a la fuga, mientras la camioneta avanzó unos 100 metros, luego de lo cual el hombre que manejaba empezó a “sentir que le dolía”. Frase que le expresó a su acompañante.
Pese a ser llevado de urgencia al hospital de Emergencias Clemente Álvarez, falleció minutos después producto del disparo que se introdujo en la parrilla intercostal izquierda.
Los asaltantes escaparon en una Yamaha 125 aprovechando la confusión entre la gente. Con posterioridad la Policía levantó vainas de una pistola calibre 9 mm.
El testigo clave es Baggio, hijo de un empresario ligado a la industria de bebidas en Entre Ríos y dueño junto a su familia de distintos establecimientos agropecuarios.
Otro testigo fue un agente de Tránsito, que vio toda la escena y fue el que corrió detrás de la Toyota para detenerla, lo que finalmente hizo el mismo joven mientras suplicaba ayuda.
Llegada la Policía se escuchó decir al joven acompañante: “A la chata no la dejo, tengo plata adentro”.
En la comisaría séptima de Rosario, Baggio declaró que estaban de paseo en la ciudad, que era un viaje relámpago y que habían hecho trámites referidos a su actividad agropecuaria. En ese contexto, el joven empresario sostuvo que no habían salido de ningún banco, pero una versión policial sostenía que los ladrones habían dado cuenta de un cheque de 36.000 pesos. Y en ese dato habrían promovido su atraco que resultó fatal.
Conmoción en la ciudad
La comunidad de Gualeguaychú está consternada por el asesinato del conocido dirigente del club Tiro Federal, de una comparsa del carnaval y empresario.
Desde ayer a la tarde comenzaron a ser velados los restos de la víctima en la sede social del Tiro Federal.
Luego de haberse realizada la autopsia en Rosario, la Justicia ordenó trasladar el cuerpo de Julio Bereciartu a la ciudad de Gualeguaychú en un cortejo profundamente emotivo con el acompañamiento de sus familiares y amigos que se acercaron al club para brindarle la despedida. En primer lugar ingresaron los hijos y familiares para luego habilitar el ingreso al público que llegó a la institución conmovida por la tragedia.
