Cerca de las 4 de la tarde del martes, personal de la Comisaría Nº 1 de Chajarí procedió al secuestro de una moderna camioneta Ford, modelo Escape, patente DRK 895, que estaba estacionada hacía un día y medio en calle Entre Rios entre Siburu y Guarumba, y que pertenecería a un grupo de personas que fueron perseguidos por personal policial –tanto en vehículos como a pié- en la madrugada del lunes. El rodado había sido abandonado por sus ocupantes luego de que, se presume, se pinchara uno de los neumáticos y en pos de escapar de la policía que venia tras sus rastros, emprendieran la huida a pie.
Todo se remonta a la madrugada del pasado lunes, cuando la camioneta llamó la atención de personal policial mientras circulaba por inmediaciones de avenida Siburu y 3 de Febrero, plena zona céntrica de la ciudad. Luego fue observada en la misma zona pero circulando por otra calle. Estiman que los ocupantes del rodado notaron la presencia policial y emprendieron una rápida huída hacia la avenida 9 de Julio, perdiéndose su pista momentáneamente. Luego la camioneta sería avistada en calle Entre Ríos, entre Siburu y Mitre, -donde finalmente quedó- con una goma desinflada. Al dar funcionarios policiales la voz de alto, como respuesta, los desconocidos efectuaron un disparo con arma de fuego.
Se inició ahí una persecución a pie por toda la zona. La policía alcanzó a visualizar dos sujetos en la huida. Uno de ellos ingresó por los fondos de una vivienda ubicada en calle Roque Sáenz Peña, saliendo luego por otra de calle Alberdi, tomando por Urquiza y escapándose. En tanto, en una obra en construcción por donde habría pasado uno de los sospechosos se halló en la mañana del lunes un buzo color gris, un gorro, una linterna y un arma de fuego Mágnum calibre 44.
El hecho podría haber terminado ahí, si no fuera por el hecho de que con el correr de los días, la información que fue siendo obtenida por la policial local, develó que el vehículo podría haber traído en su interior a integrantes de una peligrosa banda de delincuentes, presuntamente, con asiento en la provincia de Córdoba. Y es que entre los datos recabados, se supo que el rodado pertenecería a una mujer de aquella provincia, quien, según expresó a DIARIO JUNIO el Jefe policial local Crio. Ppal. Nelson Vega “estaría integrando junto a cuatro masculinos mas, identificados en Córdoba, una banda de asaltantes”. De hecho, el arma de fuego encontrada, según se supo en las últimas horas, pertenece a una familia de la provincia de Santa Fe, a la cual esta banda habría asaltado a fines de 2008. El revolver le fue sustraído a su dueño original en ese hecho.
En este sentido, Vega no descartó que los malvivientes hubieran estado esa noche buscando un objetivo sobre el cual acometer un ilícito. Asimismo, también vio como muy posible el hecho de que pueda haber una conexión local para con los delincuentes, ya que no se desecha la hipótesis de que pudieron haberse escondido en algún domicilio de la ciudad. “Si hay gente que ha visto esa camioneta en algún barrio de la ciudad, yo les pido a los vecinos que se comuniquen con la policía para brindarnos información”, anheló, ya que “de esa manera se podría confirmar la sospecha (de un nexo local)”.
Recuperaron la libertad los policías acusados de apremios. El funcionario policial, además, se refirió al reciente caso por el cual dos funcionarios de la fuerza fueron detenidos por apremios ilegales. En ese sentido, informó que “el juez consideró (en la tarde de este miércoles) que no hay motivos suficientes para tenerlos detenidos”. “La causa va a seguir, hay que esperar si aparecen testigos”, dijo Vega. “Están en libertad pero la causa sigue, está en plena etapa instructoria, donde pueden o no surgir elementos que determinen su culpabilidad.”, mencionó. “Ellos se abstuvieron de declarar y al no haber testigos que confirmen lo que dice el denunciante, se pide la excarcelación inmediatamente”, detalló, confirmando luego su puesta en libertad, aunque siguen ligados a la causa.
Aun así, el jefe policial admitió lo penoso de la situación que implica que funcionarios de la fuerza entren en el terreno del abuso de autoridad, por lo que insistió que desde su gestión se busca “cero represión, cero abuso”.
El sujeto denunciante es conocido en el ambiente local como “San La Muerte”. Tiene un frondoso prontuario por robos, hurtos y tenencia de drogas, y hace no muy poco tiempo fue noticia a nivel local por un hecho un tanto insólito, ya que un par de fines de semanas atrás ingresó a una vivienda a robar en ausencia de sus moradores. Juntó una serie de elementos como para llevarse, pero antes se quedó mirando televisión en la casa intrusada, y se durmió. Al llegar los habitantes de la vivienda, con sorpresa advirtieron el singular cuadro y llamaron a la policía, que actuó con celeridad deteniéndolo, aunque recuperando su libertad en pocas horas.