Una reciente película incorporada a Netflix con el tìtulo “Las Horas mas Oscuras” se refiere al momento en que ,derrotada Francia en 1940, dueña las tropas de Hitler de casi toda Europa occidental la amenaza de la Alemania nazi se cernía sobre Inglaterra, única nación que seguía resistiendo .
En esa emergencia, el primer ministro inglés, Winston Churchill nombró un gabinete de guerra , integrado por miembros de todos los partidos.
Medida forzada por la necesidad: pues, ante una grave calamidad pública, era necesario unificar esfuerzos.
Algo de eso estamos viviendo hoy los argentinos, enfrentados a una tragedia de proporciones iguales, y quizá peores, a las de una guerra.
Creo que es momento de poner un parate , aunque fuere momentáneo, a eso que perturba la vida política argentina desde hace algún tiempo y que llamamos “grieta”.
Algo se ha avanzado en ese camino.
Personalmente, me sentí reconfortado cuando vi al presidente Aníbal Fernández anunciar la cuarentena, flanqueado por Rodríguez Larreta (intendente de Buenos Aires del Pro) y Gerardo Morales (gobernador radical de Jujuy)
Pero quedan resabios.
Y dos por tres , volvemos a las andadas.
Me refiero a algunos:
PRISION DOMICILIARIA
Así por ejemplo, no bien sonaron las primeras voces de alarma, aparecieron los innumerables pedidos de presos, para que les otorguen la prisión domiciliaria, o algún otro cambio similar en sus condiciones de detención.
Ciertos referentes de Derechos Humanos, se opusieron invocando la condición de criminales de “lesa humanidad” que invisten algunos de ellos,. Aunque por otro lado, se pedía por la titular de Madres de Plaza de Mayo, que se les concediera el “indulto” a “presos políticos” (léase, condenados o procesados por corrupción)
Otros , quienes quizá no mirarían con malos ojos en el caso de los represores, ponen el grito en el cielo porque se le concedió el beneficio al piquetero Luis D`Elía y , más reciente, al ex vicepresidente Amado Boudou
Asombra , en unos y otros , la falta de lógica: porque si el pedido se basa en el tema de la Pandemia, lo único que debe considerarse es si, en beneficio de la salud del detenido y de los demás conviene o no que continúe alojado en un establecimiento carcelaerio, o en un domicilio particular.
El propio Papa ha señalado que el sobrepoblamiento de las cárceles puede ser motivo de propagar la pandemia.
Y no importa en este caso la índole del crimen que haya cometido, porque, en cuanto a adquirente o trasmisor del virus puede ser un asesino genocida múltiple, un corrupto o un ladrón de gallinas.
Esto, además, tomando en cuenta que nuestras cárceles están lejos de ser “sanas y limpias” como manda el artículo 18 de la Constitución Nacional.
Y que su finalidad, -lo dice también la propia Constitución- no es el “castigo”, sino la “seguridad”.
De los “reos”, y , más importante, de toda la sociedad.
IMPREVISION EN SALUD
Otro aspecto negativo es que, ante la crisis, se levanten voces señalando supuestos o reales culpables en gobiernos anteriores que habrían destruido o deteriorado el sistema de salud y los mecanismos de prevención del Estado.
Esto puede o no ser cierto.
Pero, si lo fuera débese tomar en cuenta que en este caso la “culpa” , en mayor o menor medida no se podría hacer recaer en una sola parcialidad : aunque una de ellas gobernara en la Nación, vivimos en un país federal .
Y también cabe responsabilidad en las administraciones provinciales y/o municipales, de distintos colores.
Por lo demás, naciones desarrolladas , del Primer Mundo , que se presumen con sistemas sanitarios y de salubridad mucho mejor preparados que el nuestro han colapsado peor ante un enemigo mortífero e inesperado, contra el cual nadie estaba suficientemente prevenido.
PALOS PORQUE BOGAS O NO BOGAS
Veo a importantes comunicadores sociales que critican el aparente “silencio” de la actual vice presidenta.
Y, sin embargo, antes se quejaban airados de las “cadenas” de difusión cuando esta señora desempeñaba la presidencia
CACEROLAS INTERNISTAS
Cierta “oposición” oportunista, o mejor dicho inoportuna, organiza, por redes sociales, sobre todo en Buenos Aires, un “cacerolazo”
Encaramada en un reclamo , quizá legítimo, como es reducir el gasto político.
Pero fuera de lugar cuando el tema debe centrarse en otras prioridades..
La cuestiòn se banaliza cuando se advierte que los “opositores” aparentan encaminar su embate al propio oficialismo de la ciudad de Buenos Aires.
Con lo que, surge la sospechas que, en realidad, se pretende dirimir una “interna”.
Cuestión muy chjquita, fuera de lugar y tiempo, ante el drama que vivimos.
EL ENEMIGO INVISIBLE
Hay errores humanos, de mayor o menor gravedad, que se han cometido, y muy probablemente se seguirán cometiendo.(el improvisado, peligroso, amontonamiento de jubilados; el sobreprecio en la compra de alimentos)
Es que el enemigo que enfrentamos, es artero, invisible, inédito. Nadie lo esperaba ni se proveía de reflejos o defensas adecuadas para resistirlo.
Pero, a pesar de todo debemos reconocer que, con todas sus deficiencias, nuestro gobierno, en general, está actuando razonablemente bien.
Y lo prueba el hecho que el número de infectados y muertos es proporcionalmente, mucho menor que el de otros países con menor población, como Chile o Ecuador.
Salvo excepciones, la oposición ha acompañado responsablemente el accionar oficial.
Yo creo que a nadie se le puede pedir que abandone su ideología, creencia, manera de pensar, simpatía partidista o lo que fuere.
Sólo que, a la manera que como lo han hecho otras sociedades, al menos por el momento, renunciemos temporariamente a tratar de sacar pequeños réditos políticos y/o personales, y nos enfoquemos en el esfuerzo común para superar este momento dramático.
Despues, podremos volver o pelearnos como antes.
¿Y si, en vez de eso, hacemos una fuercita màs e intentamos dejar de lado definitivamente la grieta? ¿reconociendo que es màs lo que nos une que lo que nos separa?
A lo mejor es mucho pedir…
