Pasaron más de 30 años desde que el entonces intendente Carlos María Scelzi entró en persona, a caballo junto con su comitiva, en los terrenos de Sixto Minetto, y a punta de pistola expropió los terrenos del actual Banco Pelay con fines de «utilidad pública». Eran tiempos de «guapos», en los que la familia Minetto resistió la medida, también con escopetas y algunos balazos que intercambiaron con las autoridades municipales, pero sin éxito. Ya cansado, con más de 80 años, y sin demasiados ánimos para seguir batallando –ahora en la justicia–, Minetto quiere que le paguen, porque «no me quiero morir sin cobrar lo que me corresponde».
En su última arremetida, Minetto solicitó la cancelación total de la deuda con el remate del terreno en el que hoy está emplazado el Aeropuerto local, el nuevo Autódromo y la Escuela Granja municipal. El remate tiene fecha para el próximo 27 de abril.
La Municipalidad volvió a realizar una propuesta de pago en pos de frenar este remate. Ofreció un pago al contado de 110 mil pesos, y cinco cuotas consecutivas hasta alcanzar un total de 280 mil pesos. La cifra no es caprichosa, sino que responde al monto que el municipio entiende que se le adeuda a Minetto, a raíz de la presentación judicial que se realizó durante la gestión de Lauritto cuestionando la planilla de liquidación que en su momento había reconocido el Director de Asuntos Jurídicos de la Municipalidad, Juan Miguel Lacava. El «error» no era menor, ya que arrojaba una diferencia de poco más de un millón de pesos a favor de Minetto y en perjuicio del municipio. Lo cierto es que, ante la propuesta municipal, Minetto ni se dignó a responder. En lo que pareció casi una burla, días antes de que venciera el plazo fijado para responder, publicó en algunos matutinos locales los edictos correspondientes para el remate del terreno que le permitirá cobrarse gran parte de la deuda.
La resolución final está en manos del juez que entiende en la causa, Carlos Ángel Dieci. Un magistrado que siempre ha contemplado los intereses de la comuna, antes que los intereses particulares de la familia Minetto. Así ocurrió con la inminente posibilidad de remate del edificio del ex Mercado Municipal, que el juez frenó ante una propuesta de pago del municipio. En los pasillos de la Municipalidad ya rumorean que «la única salida es trasladar toda la presión al juez Dieci, para que frene el remate».