Según consigna la crónica de Análisis, la sala estaba repleta de vecinos de barrios de la capital entrerriana, fuertemente afectados por el brote de hepatitis que se desató desde fines de 2003. Los integrantes de la Asamblea de Emergencia contra la Hepatitis hace varios días que vienen reclamando al gobierno que agilice las acciones paliativas que ha implementado ante la grave crisis sanitaria, y esta semana se reunieron con los diputados de la Comisión de Salud.
Incidentes antes de la interpelación
Poco antes de la llegada de la ministro Degani, hubo una penosa situación en el recinto. La cuestión se inició cuando el presidente del bloque de diputados del justicialismo, Emilio Castrillón (La Paz), reclamó con sorna a sus pares radicales “por qué” no le habían preguntado “por las políticas de prevención sobre la hepatitis” a los diputados Rubén Villaverde (Frente Social-Paraná) -ex ministro de Salud y Acción Social de Sergio Montiel- o a Horacio Giorgio (Frente Social-Concordia) -ex funcionario de Salud en la anterior administración-. Y acotó: “Lástima que no esté aquí para ilustrarlos un especialista de mi pueblo, que pronto estará a cargo del PAMI de Entre Ríos, el doctor José Nogueira, ex miembro de la ex concertación electoral Nuevo Espacio, justicialista él, que también será apoyado como candidato a diputado nacional por el peronismo unido de Entre Ríos para las elecciones de 2005”.
La sorprendente frase de Castrillón -en medio del debate por el avance de la hepatitis- provocó que una persona del público, visiblemente molesto, acongojado, se paró, tomó una silla desde la “barra”, la arrojó sobre las bancas y le gritó: “Mi mujer y mi hijo tienen hepatitis, hijo de puta, se van a morir… y vos haces política y te cagas de risa”.
Con reflejos envidiables, el presidente de la Cámara de Diputados, Orlando Engelmann (PJ-Federación), ordenó a la fuerza policial retirar del recinto al hombre, de condición humilde, que tenía el rostro ensangrentado por haberse golpeado él mismo con la silla que arrojó. “Se va del recinto”, dijo Engelmann a los gritos en reiteradas oportunidades y el hombre fue retirado.
La exposición
Al comenzar su exposición, la ministro Degani brindó un detallado informe estadístico sobre los números que maneja el gobierno en materia de hepatitis en Paraná, a partir de un informe de la Dirección de Epidemiología provincial; y también brindó información sobre las acciones que había desarrollado luego de desatado el brote de hepatitis en distintos barrios de la ciudad de Paraná, principalmente colaborando con los centros de salud y brindando información para prevenir la enfermedad, desde diciembre pasado.
Los diputados cuestionaron el enfoque estadístico de la funcionaria y le reclamaron acciones concretas. Los legisladores del Frente Social y del Nuevo Espacio le reiteraron el reclamo de declaración de la emergencia sanitaria, a lo que Degani respondió que “eso no es necesario porque no se trata de una epidemia”, y el gobierno “está trabajando fuertemente junto con la Municipalidad de Paraná para mejorar la situación”.
Asimismo, Degani destacó que el gobierno nacional ha colaborado ante cada solicitud del la provincia. “Cada elemento que hemos pedido, lo tuvimos rápidamente a nuestra disposición, principalmente en lo que hace a la provisión de vacunas”, aseguró Degani, quien manifestó no haber recibido un pedido de informes efectuado “hace 45 días” por el bloque del Frente Social, según dijo el diputado Horacio Giorgio.
La diputada Lucy Grimalt (La Red-Paraná) también insistió en que “la declaración de la emergencia hay que ubicarla en el contexto en el que se desató el problema: estamos en una ciudad pobre y en una provincia pobre. Creo que también permitiría coordinar las tareas, trabajar mejor y ordenar las labores entre los distintos sectores que están colaborando en la tarea de prevención. Por eso me parece necesario declarar la emergencia y conformar un comité de crisis”
De todas maneras, la ministro Degani insistió en que no es necesario declarar la emergencia sanitaria. “La única emergencia que habría que declarar debería tener que ver con hacer más cloacas y nada más. Estamos trabajando con equipos médicos con la colaboración de la Municipalidad, de los docentes y con el total apoyo de la Nación, de modo que tenemos la capacidad operativa y los casos están disminuyendo, al menos en su notificación en Paraná, aunque trabajamos para tratar de que no aparezcan brotes en otros lugares de la provincia”, respondió la titular de la cartera social.
-¿No cree que más ayuda, en Salud, nunca sobra?, le preguntó ANÁLISIS DIGITAL ante su negativa de declarar la emergencia sanitaria
-La Nación colabora con todo lo que necesitamos. Todas las vacunas, alrededor de 2000, están aportadas por el gobierno nacional -respondió.
Por su parte, la directora de Epidemiología, Elena Pedroni, que acompañaba a la ministro, deslindó responsabilidades del actual gobierno en la aparición de la enfermedad: “El virus de la hepatitis es una enfermedad cíclica, que aparece cada cinco años, y en Paraná ha encontrado una situación favorable para su reproducción”, dijo la funcionaria, que también descartó la necesidad de declarar la emergencia sanitaria porque “eso pasa cuando se exceden las capacidades locales. En el resto de la provincia no hay datos que permitan hablar de una epidemia, y los casos que se registraron en Rincón del Doll (departamento Victoria) y en Colonia Ayuí (departamento Concordia) ya fueron controlados y no alcanzan para hablar una epidemia”, expresó Pedroni.
Tras el cierre de las exposiciones de los funcionarios, la diputada Beatriz Montaldo (Nuevo Espacio-Paraná), profirió fortísimas críticas hacia la ministro al remarcar que “hay responsabilidades que alguien tiene que asumir. Si las cosas fueran tan claras como dice la ministro no tendríamos presentes a tantos vecinos en la Cámara de Diputados reclamando respuestas del gobierno. Me parece que no cabe hacerle más preguntas al gobierno porque lo que vinieron a informarnos ya lo sabíamos de otra fuente más fidedigna que es la gente. Esto nos sirve para confirmar como trabaja este gobierno, y lo único que tenemos que pedirle es que actúe como corresponde”, le espetó la legisladora.
Finalmente, la ministro Degani reiteró que “no hay una epidemia. Paraná está en una zona endoepidémica donde se dan este tipo de brotes, y si nosotros nos viéramos excedidos en nuestra capacidad operativa declararíamos la emergencia sanitaria”, sentenció.
Comité de crisis
Luego de la larguísima interpelación, el bloque del oficialismo impuso su mayoría y resolvió rechazar la declaración de emergencia sanitaria. No obstante, se aprobó un proyecto de resolución de la autoría de Lucy Grimalt que “solicita al Poder Ejecutivo provincial a que conforme un Comité de Crisis junto a directivos del Concejo General de Educación, Acción Social, y municipios para atender el problema de la hepatitis A y otras enfermedades” y para que “el Ejecutivo implemente un programa de emergencia”.
En el recinto, ya en la barra, la sensación era otra. Docentes y familiares de personas afectadas por la Hepatitis A, salieron resignados, pedían que se declare la emergencia sanitaria y la renuncia de Degani “ya”.
