La postura de AGMER, la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) y la Unión Docentes Argentinos (UDA), las tres entidades que se mantienen en conflicto en procura de un salario de 770 pesos como mínimo de bolsillo que deje a un lado los montos en negro, significa un quiebre del frente gremial conformado hace un mes. El cuarto gremio, el Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop), resolvió tomar un camino propio, y hoy asistirá a la audiencia de conciliación.
Jorge Broggi, secretario adjunto y gremial de SADOP Entre Ríos, expresó que “la voluntad de los docentes privados fue aceptar la propuesta salarial del gobierno, levantar las medidas de fuerza y acatar la conciliación, y por lo tanto vamos a asistir a la audiencia a la que fuimos convocados”.
En cambio, Sergio Elizar, adjunto de AGMER, reafirmó la voluntad de ese sindicato de desconocer la conciliación que dictó Trabajo y seguir la vía judicial para cuestionar esa medida. En igual sintonía se pronunció Raúl Vergara, secretario adjunto de AMET, quien destacó el “amplio” apoyo de los docentes técnicos a la no presentación a la audiencia de conciliación. Y Mirta Raya, titular de UDA, señaló que esa entidad se plegó al camino que siguieron los otros dos gremios.
Plenarios
A la misma hora en que en la Dirección de Trabajo se inicie la audiencia de conciliación, a las 9, en la sede central de AGMER, Rivadavia 114, dará comienzo un plenario de secretarios generales con la participación de la junta ejecutiva de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera), encabezada por su secretario general, Hugo Yasky.
Por la tarde, a las 16, los dirigentes sindicales darán una conferencia de prensa para dar cuenta de los avances conseguidos en la negociación con el Gobierno, y por qué carriles continuará el conflicto en las escuelas.