La magistrada tendrá ahora diez días para resolver si lo procesa o no. La determinación según lo consigna Análisis Digital, la adoptó poco después del mediodía, en el marco de la causa tras la denuncia del profesor César Román, un uruguayense actualmente radicado en Mar del Plata, que sufrió la detención y la tortura física y psicológica en la propia sede de la Policía Federal, junto al hoy subsecretario de Derechos Humanos de Entre Ríos, Roque Minatta, y Juan Carlos Rodríguez. La delegación de la Policía Federal en dicha ciudad dependía del regimiento del Ejército Argentino, con sede en Gualeguaychú y que conducía Valentino. El alto oficial llegó acompañado de un grupo de cuatro personas, que lo custodiaban, entre ellos, para sorpresa de propios y extraños, el ex ambientalista gualeguaychuense, Alejandro Gaham, recordado por el reciente episodio, en el cual recibiera un puñetazo de parte del dirigente Luis D’Elía, por lo cual éste fuera procesado. El «grupo de apoyo» de Valentino no permitió que el cronista y reportero gráfico Valentín Bisogni, pudiera tomar imágenes de cuando era retirado el militar, ante la mirada cómplice de personal de Gendarmería Nacional y Penitenciaría, asignados al traslado hasta Campo de Mayo, donde fue derivado poco después de las 15.
Valentino es el primer militar retirado que es detenido en la causa y, de hecho, la primera declaración indagatoria que logra la jueza Aranguren, quien reemplaza al titular del Juzgado Federal, Guillermo Quadrini, en uso de licencia y quien recién mañana se reincorporará a su función. Sucede que tanto los dos ex generales con rol clave en la última dictadura, Ramón Genaro Díaz Bessone y Albano Harguindeguy no se presentaron en los ú.timos días en el Juzgado Federal uruguayense, tal como estaba previsto. Al igual que ya lo habían hecho otros dos de los imputados por el secuestro y posterior tortura de estudiantes secundarios en la Policía Federal local, José Darío Mazzaferri y Juan Carlos Trimarco, presentaron certificados médicos para excusarse.
El mayor retirado Valentino era el responsable directo del área 223 del Ejército, con sede en Gualeguaychú. Diversos testimonios lo sindican como que ordenaba las detenciones ilegales y presenciaba las torturas. Valentino llegó a Gualeguaychú el 7 de diciembre de 1974 y permaneció allí hasta noviembre de 1976, período en el cual hubo más de 130 detenciones ilegales de dirigentes políticos, que, en su mayoría, pasaron por la cárcel de dicha ciudad del sur entrerriano, sobre la que tenía directa incidencia el entonces uniformado.