El Sínodo General de la Iglesia de Inglaterra votó hoy en la ciudad de York a favor de que las mujeres puedan ser obispo, dos años después de fracasar por escasos votos un intento similar.
Un intento similar para que las mujeres pudiesen ejercer el obispado fracasó en noviembre de 2012 por seis votos -de los 467 que integran el Sínodo-, pero hoy 152 votaron a favor, 45 lo hicieron en contra y cinco se abstuvieron. Cuando se leyó el resultado, se oyó un leve murmullo de alegría.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, durante el debate previo intentó calmar a los tradicionalistas. "Espero y confío en que esta votación salga adelante y me alegraré de ello", dijo y agregó: "Pero también me alegra que hayamos prometido buscar la prosperidad de todos aquellos que disienten en la Iglesia".
"Si no supiese que ésto iba a ser así, no apoyaría esta legislación. No se aparta a miembros de la familia o se les dificulta estar en casa, se les quiere y se busca su bienestar aun cuando se disienta", expuso el arzobispo.
Tras la derrota de 2012, incluso el primer ministro David Cameron se sumó a las críticas a la Iglesia, a la que pidió actualizarse. Antes de la votación de hoy, reiteró su apoyo a la iniciativa al señalar: "Estoy a favor de las obispas. Creo que el arzobispo Welby ha mostrado un gran liderazgo en este tema y le deseo lo mejor", manifestó Cameron.
Ahora la propuesta irá al comité eclesiástico del Parlamento, pasará por ambas cámaras y luego se precisará el apoyo de la casa real.
El Sínodo General se reunirá el 17 de noviembre para dar su aprobación final, por lo que Inglaterra podría contar con su primera mujer obispa en Navidades.
La Iglesia anglicana comenzó a ordenar en el sacerdocio a mujeres en 1994 y ahora ya son una tercera parte de los clérigos.
El año pasado Pat Storey se convirtió en la primera mujer obispo en Reino Unido e Irlanda cuando la Iglesia irlandesa la designó obispa de Meath y Kildare.
Esta Iglesia comprende la República de Irlanda e Irlanda del Norte, que forma parte de Reino Unido. En Gales y Escocia la Iglesia también ha aprobado una legislación que permite nombrar mujeres obispo, aunque no ha nombrado a ninguna.