La fuente, que pidió permanecer en el anonimato, señaló que, en caso de salir la Fiscalía, se le quitarán las herramientas para efectuar un control sobre las secretarias más importantes del Ejecutivo: Obras y Servicios Públicos; Turismo, Producción y Trabajo, Salud y Gobierno y Hacienda. “A los secretarios no les gusta que los controlen”, indicó.
En el proyecto original se establecía, en el artículo 4º, la Dirección General de Auditorías dentro de la Fiscalía. En el mismo artículo, inciso c, 1), se facultaba a la Fiscalía a “constituirse en cualquier dependencia municipal en forma sorpresiva y requerir las informaciones, documentación y registros necesarios para realizar las auditorías”.
Para que no se interponga obstáculo alguno, el proyecto, a renglón seguido, establecía: “Los superiores jerárquicos de las dependencias auditadas no podrán interponer razón alguna para negarse a proveer la documentación que les sea requerida ni a brindar la colaboración en personal para facilitar las tareas a cumplir, bajo apercibimiento de ser sancionados por el Departamento Ejecutivo Municipal”.
Auditorías anuales
El titular del Concejo aseguró que las auditorías estarán “acotadas en cada caso a que los controles estén autorizados por el Departamento Ejecutivo”. Fonseca aseguró que las auditorías que se llevan a cabo deben estar inscriptos dentro de un “programa anual” de controles a establecerse. ¿La fiscalía podrá constituirse en forma sorpresiva a cualquier secretaria para auditar? “Lo de sorpresivo no lo creemos conveniente. En forma sorpresiva ‘dentro de los programas anuales’”, respondió.
Fonseca explicó que, a su criterio, “la idea no es la del control para provocar una denuncia”. El edil prefiere, más que el término “control”, utilizar la palabra “supervisión”. “Si hay un área en problemas, hay que supervisar que es lo que está pasando a los efectos de ajustar y corregir procedimientos y normativas”, dijo
“Desde el primer momento dijimos que no tiene razón de ser la creación de un organismo, yo diría, de caracter policíaco”, aseguró Fonseca.
El presidente aseguró que ya existen dos oficinas que se encargan de los controles internos: Contaduría y el Tribunal de Cuentas de la provincia. “Los instrumentos están, lo que hay que hacer es que Contaduría y que el Tribunal de Cuentas trabajen bien. Pero no crear otro elemento de contralor cuando ya están previstos”.
Fonseca reiteró luego que no quiere que el control de la Fiscalía sea a los efectos de “esperar que se cometa un error para puntualizarlo después”. El presidente espera un control de carácter “más bien preventivo. Detectar errores para poder mejorarlos”.
El expediente se trató esta mañana en el Concejo en comisión. “Estuvimos comentando el tema con los concejales de la oposición, no sé si nos van a acompañar. Pero el bloque oficialista va a provocar un dictamen para que entre en la sesión que viene”. Si se trata sobre tablas, saldría el próximo jueves. De lo contrario, será incluido en el orden del día para el jueves 28 de abril.