La Federación aclaró además que: “no es nuestra conducta atender primariamente los problemas económicos de las municipalidades, las que son administradas por quienes el pueblo votó” ya que: “nuestro accionar se limitará siempre, con el debido resguardo de nuestra propia fuente de trabajo, a lograr que en las peores situaciones y crisis, no sean los trabajadores la variable de ajuste y de encuadramiento presupuestario y financiero de las comunas”.
La FESTRAM aclaró también que “en su lucha permanente por las condiciones laborales y salariales dignas, siempre estará del lado de cada comisión directiva, cada cuerpo de delegados, cada asamblea, que en el marco de la coherencia, prudencia y razonabilidad, reclame por la mejora en la situación de los municipales”.
“La cruda realidad de los municipales – dijeron – su legal y legítima representación no puede tener otra bandera que la justicia social, y así se lo hemos expresado al las autoridades nacionales, provinciales y municipales”.
Luego agregan: “Hemos demostrado racionalidad en nuestros actos, y nuestro único compromiso es con los trabajadores municipales, por quienes promovimos la redacción del Art. 82º, salario mínimo, no a los aumentos “en negro”, la concertación del Convenios Colectivos en el Régimen Municipal, el resguardo a los sistemas provisionales municipales, entro otros puntos; e incomprensiblemente otros levantaban las banderas de los intendentes, defendiéndolos por esta “locura e irresponsabilidad gremial”, según banderas que hoy siguen levantando.
Finalmente, consideraron necesario destacar que “con la voluntad de los intendentes se puede avanzar en la recuperación del poder adquisitivo y no dejar a los trabajadores municipales como el “cheque de garantía” si la plata no alcanza; que no haya confusión: Tenemos principios y conductas distintas; los trabajadores municipales entrerrianos saben y tienen la plena seguridad que jamás dejaremos de levantar la voz por la Justicia Social”.