Si bien quedan algunos temas por solucionar, luego de la reunión quedó claro que el mes entrante comenzará a implementarse dos categorías de profesionales, que implican valores de consulta diferentes.
Para la consulta médica se acordaron los siguientes aranceles: Para la categoría A, la consulta médica son 40 pesos a cargo del IOSPER y 20 pesos el coseguro a cargo del afiliado. Para la categoría B, son 40 pesos a cargo del IOSPER y 35 pesos el coseguro a cargo del afiliado. Para la visita en internación, en ambas categorías son 90 pesos a cargo del IOSPER.
Los requisitos para revistar en la Categoría B son: a) El médico deberá contar con un mínimo de 15 años de antigüedad en el ejercicio profesional, contados desde la fecha de su egreso universitario, lo que se acreditará con el diploma otorgado por la casa de altos estudios; b) Deberá contar con especialidad certificada y/o calidad de Jefe de Servicio en institución hospitalaria. El arancel para la Categoría B comenzará a regir una vez conformado el padrón respectivo.
Además también se conversó, ya que era una preocupación de la Federación, que todos los acuerdos se firmarán exclusivamente con las instituciones. En este sentido, se habló sobre la situación de los traumatólogos, los cirujanos y los otorrinolaringólogos.
Por otro lado, se charló sobre la adhesión de los profesionales al nuevo convenio, que ese está realizando a través de cada Círculo Médico, para conformar el padrón definitivo de prestadores. En este sentido, el presidente de FEMER informó que ya el 95 % de los médicos están adheridos al sistema.
Para otras prácticas médicas ambulatorias se fijó un incremento arancelario para las prácticas en general del orden del 30 %. En especial en diagnóstico por imágenes se desdobló en un 40 % o un 20 % según el carácter de prestador terminal o no terminal. Se fijó un valor mínimo para las ecografías de 90 pesos para aquellos códigos que no alcanzaran este arancel con el incremento del 30 %. También se establecieron incrementos diferenciales para algunos códigos de anatomopatología.
Para las prácticas quirúrgicas en internación también se produjo un incremento arancelario del 30 % en general. Se pactaron incrementos diferenciales en aquellas prácticas cuyos aranceles se consideraron retrasados y/o con incidencia significativa para alguna especialidad. Por ejemplo: parto, colecistectomía, apendicetomía, etc.