Resulta reconfortante ver como empresas locales son continuadas y expandidas por hijas e hijos de quienes dieron el puntapié inicial con la pasión y el riesgo del emprender en Empresas hoy ya consolidadas y generadoras de trabajo.
La Expo Concepción representa todo un gesto de amor por la ciudad de quienes la integran y la han hecho posible -como así también de todos los vecinos de la histórica que ya se apropiaron de ella- sólo llevada adelante por haber sabido cultivar la cultura del diálogo y el encuentro para potenciar las fortalezas de nuestra Concepción del Uruguay con participación del sector público y privado, tomando conciencia de nuestras fragilidades, de lo que aún nos falta pero que no nos detiene, para afrontar ese horizonte con la mayor responsabilidad posible pues hay un compromiso articulado, claro y ejemplar de todo el arco de la sociedad civil en conjunto con el gubernamental.
La Expo Concepción es sinónimo de amistad social ciudadana, es una señal de fortalecimiento, un mensaje claro de que nada nos puede aislar, enfrentar ni debilitar la convivencia; que la edificación de una comunidad que avanza en la aceptación del otro y crece en actitudes de respeto y diálogo ya son perceptibles en esta realidad para el hoy y para el tiempo que viene.
El desafío de la Expo de Todos nos pone como tarea constante y superadora el encontrarnos y fortalecer los lazos de pertenencia solidaria a la comunidad, en una dimensión más fraterna que no excluya ni anule lo diverso sino por el contrario, que lo necesite e integre, pues la vida en democracia es una esperanza palpitante que no deja de lado nuestros sueños de una Concepción del Uruguay bien en lo alto, siendo esos sueños los que nos guiarán a un futuro mejor para todos.