Durante la asamblea la rectora de la Institución informó sobre una propuesta realizada por funcionarios de Arquitectura y el CGE, consistente en un programa escalonado de comienzo progresivo de clases por cursos y para los primeros años pero fue rechazado por plantear un compromiso acelerado de obras que la asamblea entendió que “deben ser evaluadas”.
En cambio, la moción de la delegada de AGMER en la institución, que plantea evaluar que arreglos se iniciaran, de qué tipo, como se efectuaran, en que tiempos, que implicancias de espacio físico tendrán, etc., y ante ello continuar con las clases suspendidas hasta que una nueva asamblea determine el próximo jueves pasos a seguir, determinó la decisión colectiva de la comunidad.
Si bien se valoró que producto de la lucha de la comunidad funcionarios de Arquitectura realizaran una inspección y comprometieran acciones, se aguarda ahora por la concreción de los mismos. La escuela tiene vidrios rotos, filtraciones de agua, techos y pisos deteriorados e instalaciones eléctricas en peligro de ser afectadas por el agua y la humedad. Los desagües de techos y coberturas exteriores no han sido realizados por personal especializado que el gobierno debe gestionar y efectivizar. La obra de puesta en valor y refacción general, a cargo de la empresa Schech y Schech S. A solo emitió una “entrega parcial de obra”
Desde la Comisión de Infraestructura de AGMER “recordamos que las escuelas en situación de obra deben tener claramente delimitados y diferenciados los sectores de obreros trabajando, los cuales no deben tener contacto ni cercanía con docentes y estudiantes por razones de seguridad, de resguardo personal y buenas condiciones de dictado de clases. Tales situaciones deben ser acordadas en acta con la Institución según lo establece el acuerdo paritario de infraestructura y las empresas lo deben respetar”.
El jueves 10 de marzo, a las 20, la comunidad educativa determinará pasos a seguir en defensa de una escuela pública en condiciones dignas para todos sus integrantes.