"La economía argentina no está transitando por ningún problema", sostuvo el ministro en el que recordó que "las reservas (internacionales) están en el doble de lo que preveía el establishment -para esta altura del año-, y no hay problemas de vencimientos, ni con el dólar".
Dijo además, que la cuestión del dólar es "un tema delicado pero recurrente" y que se implementa a través de un "doble operativo que es mediático", en el que se busca instalar lo que él denominó como una "profecía autocumplida", para generar movimientos en el mercado cambiario y meter presión sobre la cotización de la divisa.
Según el ministro, la estrategia empieza con títulos en los que buscan instalar que "hay riesgos de devaluación y un futuro incierto, a lo que le agregan que el Gobierno va a prohibir esto o aquello".
En su exposición Kicillof también cuestionó a Macri, de quien dijo que "un candidato más o menos serio lo último que tiene que hacer es sumarse a fomentar una corrida cambiaria". "Lo que yo nunca había visto en mi vida es que un candidato a presidente se sume a una campaña para fomentar problemas cambiarios", señaló Kicillof, en referencia a declaraciones formuladas por Macri durante la víspera.
El ministro citó palabras del jefe de Gobierno porteño, quien habría sostenido que la gente busca comprar dólares porque "el Gobierno miente con todo" y ratificó su decisión de levantar el denominado "cepo" si llega al gobierno. "Es lo mismo que yo salga a decir que las empresas de Macri van a fundir todas, y como es algo dicho por alguien con algún conocimiento, de ahí surge un rumor y luego es la profecía autocumplida", enfatizó el ministro.
Kicillof aseveró que las palabras del precandidato a presidente por Cambiemos son una "irresponsabilidad", porque "no está hablando de sus empresas ahora está hablando del país".
Otras veces, recordó, la oposición o "el club de los devaluadores" invitaban a comprar dólares pero "lo hacían a través de sus economistas. Pero esta payasada que le hizo decir (su asesor Jaime) Duran Barba" a Macri "es una maniobra para meter miedo".
Por otra parte, respecto de la protesta convocada para mañana por una parte de las entidades que integran la Mesa de Enlace del campo, dijo que la Federación Agraria no adhiere a esa medida.
Ayer, Kicillof y el ministro de Agricultura, Carlos Casamiquela, anunciaron trece medidas para los pequeños y medianos productores agrarios, que implican para el Estado unos 3.500 millones de pesos. "El gobierno ha mirado con mucho detalle y con un espíritu bastante cooperativo de trabajo con los representantes de los pequeños productores", aseguró el ministro.
Detalló que con estas medidas, especialmente por el impacto de la caída de los precios internacionales (maíz 44 por ciento; trigo 33 por ciento y soja 41 por ciento); "el gobierno no puede sustituir al mundo que se cayó, pero puede salir al respaldo de los más vulnerables".