“El mismo Senado de la Provincia, que consideró a los entrerrianos como insuficientemente adultos como para decidir libremente sobre su propia vida sexual y reproductiva cuando no afecta a terceros, rechazando la sanción que había dado Diputados a una Ley para permitir la vasectomía y la ligadura de trompas, acaba de proponer una modificación a la ley vigente de salud sexual y reproductiva que la desnaturaliza por completo. En realidad la desnaturaliza de tal forma que una no puede menos que afirmar que esa es la manera hipócrita con que se la deroga».
«La visión fundamentalista y ultraconservadora que decide adoptar el Senado vulnera los derechos constitucionales, todas las recomendaciones sanitarias de la Organización Mundial de la Salud, la Ley Nacional de Salud Reproductiva y la política del Ministerio de Salud de la Nación».
«La ley vigente es derogada/ tergiversada por el Senado por tres modificaciones sorprendentes. La primera y más grosera es la eliminación lisa y llana de toda referencia a evitar los embarazos indeseados. Parece ser que a los Senadores del PJ, la UCR y el Nuevo Espacio no les preocupa la proliferación de embarazos adolescentes, de niñas madres, y todos los problemas relacionados incluyendo la mortalidad materno-infantil que esto trae aparejado».
«La segunda es la eliminación de la perspectiva de género, con lo que parece que los promotores de esta modificación no consideran importante promover las relaciones de igualdad y compañerismo entre el hombre y la mujer. A los Senadores no les parece importante que la educación sexual que imparta el Estado apunte a erradicar formas de dominación patriarcal, discriminación, abuso, degradación y violencia que hoy padecen niñas y mujeres de nuestra provincia».
«La tercera es la expresa renuncia a los derechos incorporados por la Constitución Nacional de 1994 y la legislación nacional vigente, al encuadrar la educación sexual en un Decreto de Moine de 1993 que, por supuesto, no tiene nada que ver con lo establecido por la ley 9501, y rechaza toda participación en materia de educación sexual de los profesionales de la salud y de las ciencias sociales y de las organizaciones de la sociedad civil».
«Frente a esta ofensiva oscurantista de los senadores de los tres partidos que no tiene nada que ver ni con los problemas que en materia de salud sexual y reproductiva tenemos las entrerrianas y los entrerrianos, reafirmo mi compromiso para evitar que este engendro no sea aprobado en Diputados y mi compromiso de seguir la lucha para hacer plenamente vigentes nuestros derechos y efectiva la ley vigente”.
