Pacher presentó una serie de argumentos para cuestionar la legalidad del importe de 173 mil millones de dólares reclamado actualmente por los acreedores extranjeros. Además recurrió a la figura de Alejandro Olmos, quien a lo largo de “18 años trabajó de manera solitaria, arriesgando su salud y su dinero, con el fin de probar la ilegalidad de la deuda externa”, situación que se produce en el año 2000 cuando el Juez Federal Jorge Ballestero dictaminó que la deuda externa argentina contraída entre 1976 y 1982 fue producto de mecanismos irregulares «que tendían, entre otras cosas, a beneficiar y sostener empresas y negocios privados _nacionales y extranjeros_ en desmedro de sociedades y empresas del Estado», cuyo empobrecimiento «se vio reflejado en los valores obtenidos» con su privatización”.
En este período la deuda se incrementó en un escandaloso 550 por ciento. Sin embargo, el caso concluyó sin culpables: el único imputado no procesado, el ex ministro de Economía Alfredo Martínez de Hoz, quedó sobreseído definitivamente por prescripción de la causa. Olmos había advertido ya que “la deuda externa es la mayor estafa al pueblo argentino”.
Durante aproximadamente dos horas y ante un atento auditorio, que incluyó a profesionales, estudiantes, comerciantes, trabajadores y legisladores provinciales, el Contador Pacher realizó un exhaustivo análisis del proceso que constituye la actual deuda externa argentina, mencionando como antecedente el primer empréstito concedido a la Argentina en 1824 por Inglaterra, de 1 millón de libras esterlinas, que terminó cancelándose en 1910 con el pago de 23 millones de libras esterlinas.
Con el retorno a la democracia en 1983, siendo presidente en aquel entonces Raúl Alfonsín, “se pierde una valiosa oportunidad de llevar adelante el cuestionamiento acerca de la legitimidad de los importes reclamados, cuando el gobierno decide asumir el conjunto de la deuda, tanto privada como pública, contraída durante el régimen militar”, manifestó el disertante.
En un emotivo final, tras recibir un libro de Alejandro Olmos firmado por los concurrentes, los símbolos entrerrianos y un ejemplar de la Constitución Provincial, Pacher culminó su exposición diciendo: “yo soy de una generación que ya ha hecho lo suyo, ahora son los jóvenes los que deben luchar, pacíficamente, pero luchar por la verdad y no bajar los brazos, ya que hay mucho por hacer por esta patria”, para despedirse de este modo, en medio de efusivos aplausos, de los espectadores que asistieron a esta importante convocatoria.
