Loggio recordó que cuando comenzó la actual gestión, se encontraron con una privatización “apurada”, un convenio “que no defendía el interés municipal ni de el de los contribuyentes”. No obstante, constituyeron una mesa de diálogo con la empresa donde plantearon tema como el recupero de 100 has., la disposición final se le iba producir con los residuos peligrosos, establecer fechas para las inversiones, etc. “Esa mesa en un momento se interrumpe y Cetru deja de decepcionar nuestros requerimientos, no atiende el teléfono ni responde los correos electrónicos”, dijo Loggio.
No obstante, el fin de semana, los trabajadores denunciaron que la empresa “vació el sector administrativo”: se llevó la documentación, facturas, computadoras. Los dependientes de Cetru se reunieron esta mañana con Loggio en la subsecretaria. Mientras tanto, el intendente Gustavo Bordet planteó la posibilidad de rescindir el convenio. Los asesores legales estudian la anulación pero: “sin apurarnos pero con toda la contundencia necesaria para no someternos a futuras exigencias de indemnizaciones”, según el subdirector.
En tanto, el concejal Martín Santana (PJ), uno de los ediles denunciado, dijo esta tarde que no estaba arrepentido de haber cedido en comodato el Campo del Abasto a la empresa. “Cuando nosotros votamos la ordenanza lo hicimos con la mejor intención para que el trabajo que se estaba haciendo ahí, ir y revolver basura, se le diera a esa gente”, indicó al programa “Cuarto Poder” (Fm Oíd Mortales). Recordó que una de las razones por las que votó a favor de la cesión era la posibilidad de generar trabajo para 100 personas. Otra de las causas por las que levantó la mano en el recinto era que el proyecto iba a dejar de generar gastos para el municipio.
No obstante, Loggio dejó en claro que la empresa “nunca cumplió” con el procesamiento de la basura, ni terminó las obras civiles ni el cerramiento perimetral, no liberó zonas para hacer el volcado de los camiones que juntan basura. “Hoy es una situación caótica”, expresó.
El subsecretario agregó que la cesión fue “un rotundo fracaso”. Y mencionó que todo comenzó con la modalidad con la que se decidió concesionar el predio: de manera directa sin llamar a licitación pública. “A las apuradas se hizo y termina como no podía ser de otra manera: sumamente desprolija sin lograr el cometido de lograr el reciclado de basura”, expresó.
En noviembre de 2006, el ex concejal Eduardo Miranda y el ex- titular de la Fiscalía de Investigaciones Administrativa, Oscar Rovira, denunciaron al intendente Juan C. Cresto y a siete concejales por “abuso de poder”. La denuncia se basa en la entrega por 20 años del Campo del Abasto a una empresa privada sin haber efectuado un llamado a licitación pública. La supuesta ilicitud se configura cuando un “funcionario o corporación pública disponga, grave, o destine bienes del Estado en beneficio de la pura y simple actividad de un particular”.
Además, los ex-concejales denunciados fueron: Jorge Ferrera (PJ), Heriberto Pezzarini (PJ), Martín Santana, (PJ) Roberto Abel González (PJ), Roberto Chabrillón (Todo por Concordia), Marcos Wdowiak (Bloque Vecinal) y Ricardo Zubillaga (Nuevo Espacio).
En tanto, Cetru dejó 13 empleados sin trabajo. El miércoles se van a reunir con Loggio y van a analizar el futuro laboral. “Hay interés del municipio de abordar la realidad de esos trabajadores pero no incorporándolos a la planta municipal. Sí buscando algún mecanismo, alguna figura legal que les permita seguir trabajando ahí”, dijo el subsecretario.
El futuro inmediato del Campo del Abasto es incierto. En la actualidad es propiedad privada pero la ausencia de un alambrado perimetral permite que ingresen “decenas sino es que hay una centena”, dijo Loggio, de personas que revuelven la basura para encontrar su sustento diario. El municipio sigue volcando la basura mientras que los empleados “reciclarán un 10 %”. El subdirector dejó en claro que, una vez que se terminen los trámites legales, la municipalidad volverá a trabajar en el predio.
“Esto no era negocio”
Por su parte, Santana dijo que, a raíz de lo acontecido: “me dan la razón de que no era negocio. La municipalidad gastaba y no tenía ingresos; esta empresa decía que a través de la venta de residuos clasificados y de servicios de volcado de otras ciudades cercanas le iba a generar los suficientes ingresos para pagar los sueldos y, a su vez, ganar plata”.
El edil dijo que Cetru instaló máquinas y advirtió que se debe tomar alguna medida para evitar que se las lleven. “Va a haber que controlarlo porque si la municipalidad tiene que seguir trabajando con esas máquinas lo siga haciendo”, expresó.
Respecto de la denuncia, Santana sostuvo que no se llamó a licitación porque: “se lo intentó hacer lo más rápido posible y se tomó como ejemplo el buen trabajo que había hecho la empresa en otro lugar”. A esto añadió que en la actualidad se podría llamar a licitación pero: “no creo que haya empresas que se presenten porque no da el volumen de basura”.
Más adelante, dijo: “no es que estábamos queriendo hacer todo lo que se dijo en un momento, de que había negocios. Esto no era negocio, se intentó hacer algo en su momento que no le genere gastos a la municipalidad; que en el hipotético caso que dejaran de trabajar dejarle algún capital a la municipalidad”.
