En ese sentido, dijo que hay tres grandes factores de contaminación que afectan la calidad de las aguas del río Uruguay: los efluentes cloacales urbanos, efluentes industriales y los lixiviados (materia orgánica degradada) que arrojan las actividades agropecuarias como las granjas de aves, cerdos, pesticidas, etc.
La Caru “no tiene competencia sobre la habilitación de las playas”, dijo Ruiz Orrico y descargó la responsabilidad sobre los intendentes de cada localidad. “Son los que tienen la facultad de habilitar o no habilitar la playa”, dijo.
En Concordia, “hay problemas serios aguas arriba de la represa no sólo de bacterias sino también de floraciones algales”. Aguas abajo, se monitorean tres o cuatro playas. “Hay algunas que están dentro de la normativa afectada por Caru y otras con algunos niveles un poco más elevados”, señaló.