Los jueces Martín Irurzun, Horacio Cattani y Eduardo Farah estarán, desde el mediodía, en posición de decidir si ratifican o apartan a Bonadio del expediente por la venta de dólar a futuro, en el que imputó, citó a indagatoria, y tiene previsto procesar a la exmandataria. La recusación fue planteada por los abogados de uno de los actuales directivos del BCRA Pedro Biscay, quien hará una exposición oral de los argumentos por los cuales pidió que se lo desplace por falta de imparcialidad. En sí, son las mismas objeciones que han planteado a lo largo de los años quienes atraviesan el juzgado de Bonadio como acusados: trabas a la hora de acceder al expediente, límites en la extracción de fotocopias, demoras para las defensas. La Sala II tiene antecedentes de haber respaldado -aunque con advertencias- al magistrado. Según el procedimiento tiene hasta cinco días hábiles para tomar la decisión, a partir de hoy. Pero una inmediata resolución puede alterar el panorama, tensionado por la multitudinaria convocatoria de acompañamiento que el kirchnerismo planea el miércoles. Fuentes judiciales especulan con una rápida resolución que limite la presión que recaerá sobre el Poder Judicial, luego de una semana vertiginosa. Toda ratificación, aun con llamados de atención hacia el titular del juzgado federal N°11 que puedan abrir la puerta a un futuro apartamiento, será leída como una carta blanca hacia el juez. Las versiones sobre una eventual orden de detención contra la exmandataria son avivadas tanto por fuentes judiciales como por kirchneristas, y lejos de perturbar, divierten al magistrado.
Ese dato no pasa inadvetido para el Gobierno (por el clima político y sus consecuencias), ni para el presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti, de buena llegada a la Sala II. Un segundo escenario puede deparar su apartamiento, que suspendería las indagatorias previstas y anularía las ya concretadas, a la par que derivaría todo el expediente a un nuevo juez que deberá ser sorteado. El tercer escenario, diferiría el suspenso. La Cámara podría pedir -para decidir- el expediente completo de la causa "dólar a futuro" con el fin de comprobar si existieron las irregularidades confirmadas. Si el expediente "sube", el juez instructor deberá suspender cualquier actuación, mientras permanezca en la Cámara, incluidas las indagatorias. Eso prolongaría el suspenso, lo mismo que si la Cámara decide dejar pasar el tiempo antes de tomar una decisión, permite que continúe el trámite de indagatorias, y extiende su decisión al límite de los plazos, lo que llegaría previo a que Bonadio se expida sobre la situación procesal de todos los imputados. Es lo único que resta porque el juez no tiene en curso otras medidas en ese expediente en el que acusa a la plana mayor del anterior Gobierno de haber tenido la intención de realizar una operatoria perjudicial para el Estado con la suscripción de contratos a futuro con un valor de la divisa inferior al que adquirió luego de la devaluación de diciembre pasado.
Imputación a Cristina
La causa por lavado de dinero que tiene detenido al empresario kirchnerista Lázaro Báez deparó sobre el fin de semana la novedad más relevante: la imputación por parte del fiscal Guillermo Marijuan de Cristina de Kirchner, amparado en la declaración como presunto "arrepentido" del valijero Leonardo Fariña, quien pugna por ingresar al programa de protección de testigos y abandonar la cárcel de Ezeiza, donde está preso hace dos años por evasión fiscal. Desde esa declaración, la causa se encuentra en secreto de sumario, aunque trascendió un requerimiento del fiscal para ampliar la nómina de imputados entre todos quienes fueron mencionados por Fariña, ya procesado por lavado de dinero. La nueva estrategia de las defensas podría incluir que pidan ampliar sus indagatorias, para intentar neutralizar los dichos del presunto valijero, los cuales Sebastián Casanello buscará esta semana corroborar. Ya puso en marcha medidas para confirmar el esquema que relató Fariña, que difiere con la que venía trabajando la Justicia. Sobreprecios en la obra pública, cuyos excedentes eran transportados en vehículos desde el sur, acopiados en SGI y girados al exterior a bancos en Suiza, Uruguay, España.
Allanamiento a escribanía
Por lo pronto, el juez dispuso, durante la medianoche de ayer, allanamientos en la escribanía de Leandro Albornoz, señalado como un hombre clave en el armado de sociedades comerciales atribuidas a Báez.
Marijuan apuntó a la exmandataria por lavado de dinero, pero también al exministro de Planificación, Julio De Vido, al extitular del Banco Nación Juan Carlos Fábrega, al titular de la Cámara Argentina de la Construcción Carlos Wagner, y a Ernesto Clarens, un financista cercano a Báez y a los Kirchner. Luego partió de viaje a Estados Unidos y dejó la causa temporalmente en manos de su par Carlos Rívolo. Cualquiera sea su destino en "dólar a futuro", Bonadio se prepara asimismo para ponerse al frente de la causa por la firma Los Sauces SA, que también involucra a la exmandataria en una situación similar a la de Hotesur, expediente del que fue apartado por irregularidades. La semana pasada, los acusados en la causa Báez sólo presentaron escritos y se negaron a contestar preguntas. Con la extensa declaración de Fariña, esa estrategia deberá modificarse. En tanto se prevé que renueven un pedido de excarcelación tanto Báez como Ricardo Jaime, detenido por el juez Julián Ercolini en el marco de la causa por la compra de trenes a España y Portugal. Esa declaración disparó la indagatoria a De Vido para el próximo 27. Ya estaba citado el 21 por Bonadio, en el marco de la causa por la Tragedia de Once. Jaime le pedirá a la Cámara que lo deje en libertad.
