La seguridad del Concejo tenía órdenes de sus superiores y se justificó diciendo que ya había representantes de la asamblea. “Cabe destacar que esta asamblea no tiene representantes, sino voceros, que son elegidos de manera espontánea dependiendo de la situación”, explicaron.
Además, los miembros que lograron entrar a la sesión, quienes se identificaron como periodistas porque suponían que se les iban a impedir el acceso, intentaron dialogar con los concejales previamente al inicio de la sesión, con el fin de explicarles cuál es la propuesta y el objetivo de la asamblea, no logrando entablar conversación por impedimento del personal de seguridad.
“Los demás miembros que intentamos ingresar de manera pacífica no pudimos expresarnos libremente ni participar de la sesión que es pública según lo indica el reglamento interno del Concejo, en su artículo 5º: “- (…) todas las sesiones del concejo serán públicas (…)”. Con esto, queremos demostrar que hubo una clara violación a nuestros derechos civiles y políticos como lo establece el artículo 75 inciso 22 de la constitución nacional, el artículo 12 de la constitución de la provincia de entre ríos y el artículo 19 de la ley general de ambiente”, expresaron los asambleístas
Además de la denuncia, la asamblea como medida de acción directa resolvió levantar el campamento y convocar a una concentración para el miércoles 13 de noviembre frente a la municipalidad, dado que ese día se realiza la próxima sesión del Concejo Deliberante.