Las personas con discapacidad son, ante todo, personas que viven, sueñan, estudian, piensan, trabajan, tienen familia y son parte de un todo. Es el caso de Marcos Ramírez, un joven de Concordia no vidente que sufrió un acto discriminatorio. En una entrevista brindada a DIARIOJUNIO, Ramírez indicó que el hecho sucedió en las intersecciones de calles Pellegrini y Roque Saenz Peña. Allí, el chofer, se negaba a transportarlo hasta que finalmente aceptó pero con la advertencia de que era la primera y última vez.
“El chofer argumentaba que yo no podía viajar solo en el colectivo siendo no vidente”, indicó el comunicador. Además, explicó que en su caso, por ser no vidente y por tener la capacidad de manejarse solo, no necesita estar acompañado por alguna persona. El joven se dirigía a ACICION (Asociación de Ciegos Concordienses), y durante el trayecto el colectivero se encontraba molesto por la situación.
“No entiendo la intolerancia de esta persona”. Aseveró: “No quise levantar una denuncia penal, no creo conveniente”.
Marcos se encuentra en 2do año de la Tecnicatura Superior en Comunicación Social. Además, trabaja en distintos medios de comunicación locales.
Debido a ello, tiene la posibilidad de expresar su descontento con esta actitud: “No es solamente por defender mi persona. Yo como tengo la posibilidad de poder contarle a los medios lo que me pasa, lo hago no solamente por mí sino para que a nadie más le pase”. El concordiense reflexionó: “Todas las personas tenemos derecho a manejarnos libremente, siempre y cuando las capacidades nos lo permitan. Al vivir en un país democrático tenemos muchas leyes que nos avalan, que hacen que hoy haya más inclusión social, aunque a veces están empañadas por este tipo de hechos”.