Debido a las condiciones del viento el humo no llegó a la ciudad de Rosario, pero sí a zonas aledañas a ese conglomerado urbano. «Los incendios, que comenzaron en el mes de marzo, no han parado, a lo que se suma a que en las últimas jornadas no ha llovido, lo que genera que la greda siga prendida. Se los apaga, pero no alcanza para el enfriamiento de la greda, que son cincuenta centímetros (de tierra) para abajo, que quedan en suspensión, prendidos», explicó el funcionario.
