La adolescente, domiciliada en el barrio San Isidro, se ausentó de su casa el domingo, hecho por el cual su madre radicó exposición en sede policial y se trataba de dar con su paradero. Las diligencias llevaron a un domicilio de la zona sur de la ciudad, donde al parecer la joven estuvo con un conocido, pero luego se retiró para no saberse nada de ella hasta horas de la tarde del lunes, cuando apareció en el barrio 48 Viviendas del Hospital Viejo, manifestando que había sido golpeada y que habrían intentado abusar de ella. Esto generó gran conmoción en el lugar, ya que la menor, que presentaba una importante hemorragia aparentemente por una herida en el rostro, fue auxiliada por vecinos que dieron aviso a la Policía y solicitaron una ambulancia que finalmente la trasladó al hospital, donde fue sometida a estudios por los médicos.
Según trascendió, los relatos eran sumamente confusos, ya que en principio a quienes la ayudaron, les habría manifestado que estuvo privada de su libertad en la zona del barrio Las Mandarinas, pero esto no estaba claro, por lo que especialistas intentaban calmar a la joven y recabar mayores datos, al tiempo que sería sometida a una revisión médica.
Personal policial tiene la misión de tratar de obtener no sólo los datos aportados por la menor, sino también por la madre y algún testigo que pueda dar certeza de lo ocurrido. Pese a esto, por dichos de allegados a la víctima se trata de confirmar si la misma fue secuestrada por alguna persona y luego sometida a abusos sexuales durante varias horas, según diario Uno.
