En primer lugar, el vecino hizo referencia la falta de comida para quienes permanecen haciendo guardia en la esquina sino la falta de baños químicos. “En la otra cuadra trajeron y acá baños no ves. Acá hay restos de troncos que han volteado muros que los estamos sacando nosotros. Que venga un camión de residuos. Que venga gente a preguntar que se necesita”, indicó Gerardo y señala una parva de residuos que nadie junta por lo que optan por incinerarla.
“Toda la cuadra se evacuó por sus propios medios. Cómo no te vas a evacuar cuando el día lunes después de la lluvia teníamos el agua en la boca de tormenta y a las 11 de la mañana yo entro a mi casa, estamos hablando de cota 14,50 y teníamos casi 20 cm. de agua adentro de la casa, no dio tiempo de nada”, dijo el vecino.“Tengo cosas apiladas arriba de tambores que están bajo de agua”, añadió.
El vecino quiso alquilar una casa y se encontró con precios prohibitivos. “Hablan de la solidaridad del concordiense ¿de que solidaridad hablamos? Me pidieron $ 3000 por el alquiler de una casa en el barrio Vélez Sarfield. Es un contador el que me pidió $ 3000 y garantías por dos meses en dólares ¿Dónde está la solidaridad?”, se preguntó.
Gerardo desconfía de la altura actual del río que informan las autoridades. “Los uruguayos hablan de 16,20 mts. y creo que no están equivocados”. “Esto lo viví en el año 59 cuando tenía cuatro años. Pero no existía la represa. Esto es realmente un mal manejo de la gente que está en Salto Grande. Por más que saquen solicitadas de todos los empleados que no quieren estar en contra de la gente pero lo único que quieren es generar energía para recaudar dinero, nada más”, dijo el vecino inundado.
Gerardo entiende que con el sistema de Hidrología que tiene la represa se debió haber previsto lo que iba a suceder. “Con 45 días de anticipación saben lo que va a entrar en la cuenca superior. ¿Como me vas a decir que no sabés el tiempo como va a estar?”, dijo.
En cuanto a las pérdidas, dijo: “hay cosas que no las podés recuperar como una biblioteca completa con mucha historia y libros de mucha antigüedad”. Entre ellos un Martín Fierro “antiquísimo”. “No son cosas de valor material sino sentimental. Es mucho más importante y con plata eso no lo compras”, dijo Gerardo, que había sufrido un infarto hace 30 días. “Y con esto…no sé”.
Pérdidas materiales también sufrieron algunos vecinos de la cuadra. Tres jóvenes que viven casi en la esquina de Moreno y Corrientes perdieron todo. “Tienen media casa bajo el agua, el televisor está flotando, la cocina está flotando, la heladera está flotando…”, indicó.
