
Hoy Frigerio habla de una Entre Ríos que duerme la siesta y debe despertar. Pero se olvida que el verdadero adormecimiento vino cuando frenaron las obras, despidieron trabajadores, fundieron empresas y paralizaron el desarrollo de Entre Ríos. Ahí sí, más que dormir la siesta millones de argentinos y argentinas padecieron la pesadilla del macrismo explícito. Y Rogelio fue parte, cómplice y ejecutor en el “desgobierno” de Macri y sus aliados.
Si como Ministro de una de las carteras más importantes no hizo nada por Entre Ríos, ¿por qué lo haría ahora? Si como Diputado Nacional estuvo del lado del centralismo porteño, aún en perjuicio de los intereses de nuestra provincia, ¿por qué sería diferente de ahora en adelante? Eso es lo importante, más allá de las fotos sonrientes saludando a nuestros paisanos.
Es lindo recorrer nuestra hermosa provincia, prometer cualquier cosa y hablar de lo que no se conoce, apelando a la desmemoria de algunos y la complicidad de otros. Pero gobernar es mucho más que marketing y redes sociales, es responsabilidad, compromiso, hechos concretos y, principalmente, verdadero amor por nuestra querida Entre Ríos.