Según el ex compañero de gobierno de Busti, el razonamiento de él y sus seguidores “es que todo aquel que no este de acuerdo o no milite con él es un traidor y el que no trabaje en su agrupación es un haragán”. Continuó señalando que “esa despreciable expresión convertida en consigna : son todos unos muertos que han llegado del saco de Jorge”, degrada hasta lo mas profundo la dignidad de los compañeros, o sea nadie existe sólo yo, con lo cual inevitablemente se camina por la cornisa de la soberbia. y se ha olvidado una de las 20 verdades peronistas “aquel peronista que se crea mas de lo que es, deja de serlo y se convierte en oligarca”, dijo.
El dirigente oriundo de Crespo no se quedo ahí y fue más allá planteando que “No se puede utilizar a los 30 mil desaparecidos para el discurso político, eso es algo muy serio, muy profundo, sobre todo para aquellos que vivimos esa experiencia y es una llaga ardiente y dolorosa que llevamos en nuestros corazones, con eso no se puede hacer discursitos y al mismo tiempo salir corriendo a hacer actos con Felipe Sola, que hasta ayer estaba o todavía esta en un proyecto político con los impresentables de Macri y De Narvaéz que son los candidatos por dentro de los enemigos de la Argentina para reimplantar el neoliberalismo, y que fueron los tres galanes millonarios del culebrón político de los medios concentrados de comunicación a los cuales por supuesto tuvieron que pagarles votando en contra de la nueva ley de radio difusión”
“No se puede haber predicado toda la vida que jamás hay que irse del peronismo y haber repudiado hasta el hartazgo a los compañeros de la lista 100 (o sea , ayer traidores, hoy peronistas y militantes porque son sus socios políticos) y con una actitud mas de “taita” de barrio que de dirigente político amenazar con plan A y plan B o sea ir por fuera del peronismo, poniendo en duda no se sabe que falta de transparencia o impedimento de participación que sólo está en su imaginación”. “Los compañeros que van en colectivos a sus actos son militantes, los que van a otro son comprados por el aparato o sea nuevamente soberbia y degradación. Basta ya de todo esto, yo no quiero confrontar con nadie, hoy es tiempo de trabajo fecundo de solidaridad entre todos, de discusión en serio, no de los políticos, sino de política, de políticas en serio, de modelos, de qué queremos realmente para nuestra Argentina, no de lo que quiere algún dirigente para él” aseveró el dirigente.
“Yo respeto a todos los compañeros por igual, ocupen el lugar que ocupen, no tengo problemas personales con nadie, si puedo llegar a tener diferencias políticas, pero esas diferencias hay que resolverlas con diálogo, pero con diálogo en serio, es decir no solo hablar, sino que también y fundamentalmente hay que escuchar al otro y en ese escuchar, aprender que todos tienen algo que aportar al conjunto”.
