El documento pide "evitar cualquier acto de confrontación y mantener un clima de paz y convivencia que permita un diálogo fluido para encontrar soluciones conjuntas a los problemas de los pueblos indígenas".
El Ejecutivo del país neogranadino se comprometió a instalar estas mesas para llegar a un acuerdo, mientras que las comunidades indígenas se comprometieron a despejar la vía Panamericana.
El paro nacional indígena inició el pasado lunes en la denominada Minga por la vida, para reclamar la implementación del capítulo étnico del Acuerdo de Paz firmado en 2016 en La Habana (capital de Cuba).Los manifestantes han denunciado que en varias oportunidades han sido reprimidos por las fuerzas de seguridad.
Las Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos y la Defensoría del Pueblo de Colombia harán "monitoreo de este acuerdo en los diferentes puntos geográficos en coordinación con el programa de defensa de la vida y los derechos humanos del CRIC".
