Mientras recorría las instalaciones aún inundadas por el trabajo de los bomberos, Gustavo Porcheto contó a este sitio digital que “a mi me llamaron los chicos que estaban cuidando y trabajando en las últimas cosas que necesitamos hacer y no lo podía creer”. Detalló que “eran alrededor de las 3 y cuarto o 3 y media de la mañana. Cuando llegué estaban los bomberos de la Policía y Voluntarios tratando de apagarlo”.
Confirmando lo informado anteriormente, dijo que el incendio “se había iniciado en el parte de atrás, en la cocina”, donde subrayó que “no había conexiones eléctricas”.
Consultado sobre el hallazgo de una botella con restos de combustible y la posible vinculación con el incendio, Porcheto se mostró cauto, estimando que “si, es muy probable” que estuviera relacionado, “pero yo prefiero esperar a los peritajes, que se investigue y buscar a la persona que lo hizo”.
Por último, y ante el resultado positivo que tuvo el tratamiento antillana utilizado en el techo de paja del local bailable, el concesionario del local admitió que no tenía “elementos técnicos para valorizarlo, lo que se vio es que luego de tres horas de encendido, demostró que si (el boliche) hubiera estado con gente, había tiempo para evacuar y salir. Pero el análisis lo debe hacer bomberos”, remarcó.