Desde la Brigada de Abigeato se nos informó que el procedimiento se llevó a cabo en oportunidad en que se realizaba un control de rutina, en el intento de terminar con la venta clandestina de carne.
Al realizar su trabajo, los agentes hallaron en un freezer que estaba dentro de la cámara de frío, 291 kilos de carne en trozos y en mal estado.
Tomó participación el médico veterinario de la Municipalidad y, se informó, que la carne sería finalmente quemada. Se aplicó la Ley provincial Nº 7292.