Que venimos desde hace años planteando la necesidad de una solución más profunda para los problemas más acuciantes de la sociedad porque sabemos que hay suficiente dinero como para terminar con el hambre en Entre Ríos para luego llevar adelante un plan de empleos genuinos que nos contenga a todos.
No se puede negar que somos una de las ciudades con más pobreza de la Argentina.
Día a día somos testigos y victimas del hambre, la desocupación, la desnutrición infantil y el resultado de los empleos basura.
Que proponemos y hacemos nuestro el reclamo de la CTA del salario universal por hijo, del seguro de empleo y formación, de ningún hogar bajo la línea de pobreza. No solo porque estamos de acuerdo, sino porque somos CTA.
Por eso nos proponemos encontrarnos con otros compañeros, porque esto es sólo un comienzo, los primeros pasos, pero necesitamos mucho más, muchísimo más.
Necesitamos unidad, palabra mágica que tanto mencionamos, pero que apenas sentimos, necesitamos educación, porque sólo sabiendo lo que queremos y cómo podemos hacerlo es que dejaremos de ser manipulados, utilizados y podremos ser realmente libres. Porque creemos en la unidad hoy manifestamos nuestra solidaridad con los compañeros de ATE que llevan adelante un plan de lucha. Necesitamos información, pero no amañada por los intereses de los poderosos, si no la información que llegue a todos y que sea fiel reflejo de lo que vivimos, para tener la capacidad de reaccionar ante lo que nos rodea. Necesitamos acción, acción revolucionaria que nos permita modificar lo que sabemos que no debe seguir ocurriendo, para poder impedir que personas sin escrúpulo tiren la leche que es tan necesaria para muchos niños que hoy mueren de hambre, que haya pan, trabajo con salarios dignos para tantos hombres y mujeres que la necesitan.
La vida es muy corta, dicen que cuando estamos aprendiendo a vivir, debemos comenzar a despedirnos, para algunos es más corta aun porque no pueden defenderse del destino cruel e inhumano que le imponen los que tienen el poder, pero le digo que los que luchamos todos los días lo hacemos gustosos, nos entregamos por lo que creemos o porque no queremos que nos arrebaten lo que ganamos con nuestra lucha y la lucha de otros compañeros que hoy se movilizan, porque de alguna forma pretendemos que sientan terror los poderosos. Pero en esta vida mientras tengamos el privilegio de existir, hagámoslo con dignidad y valentía, vivamos de forma tal que al momento de la despedida no sintamos dolor por los años pasados en vano, aprovechemos al máximo lo que tenemos, disfrutemos el privilegio de vivir, seamos alegres, pero no podemos dejar de ser profundos.
No hay mayor alegría que saber que somos capaces de luchar por lo que creemos, no hay mayor alegría que sentirte útil a otro ser humano.