“Hablar sobre la Hidrovía es hablar sobre qué país queremos, interrogarnos qué decisión vamos a tomar con respecto a nuestros recursos, si vamos a continuar dejando en manos privadas extranjeras o si el estado va a asumir un rol activo en la administración de este recurso. Considero de suma importancia que este cuerpo deliberativo se manifesté apoyando las gestiones tendientes a la defensa sobre la soberanía y el fortalecimiento del federalismo, entendiendo que el acuerdo celebrado entre el gobierno nacional y las siete provincias en agosto del año pasado tiene ese propósito”, destacó el edil.
«De recuperar la soberanía de esta vía troncal permitiría el desarrollo integral de la región, en donde se produce principalmente soja y sus derivados, algodón, girasol, trigo, lino, mineral de hierro, manganeso y otros productos industriales y agroindustriales», manifestó.
Gallo destacó en su alocución que la Hidrovia, formada por los ríos Paraguay y Paraná, tiene una extensión de 3.442 km, influye en un área directa a una población cercana a 20 millones de habitantes. “Está considerada una de las reservas hídricas más importantes del planeta, no sólo por el caudal de los ríos que desaguan en él, sino por la diversidad biológica del área y por la riqueza de los territorios que aquellos bañan”, dijo.
“Desde donde se inicia la Hidrovía hasta el Gran Rosario Santa Fe, hay 105 terminales portuarias. La misma concentra el 82 % de los despachos de exportación argentinos de granos, harinas y aceites y el 91% del movimiento de cargas contenerizadas de Argentina, operan 4.500 buques al año desde el Gran Rosario hasta el Océano y se movilizan más de 600 mil automóviles. Las principales cerealeras descargan en esa vía”, destacó.
La semana pasada, el Gobierno formalizó a través de la Resolución 129/2021 publicada en el Boletín Oficial la prórroga por 90 días de la actual concesión de la Hidrovía, que lleva 25 años, a días de la finalización de su contrato. Esta medida confirma un sistema de operación privado, como el que tiene en la actualidad, y no estatizado, tal como piden algunas agrupaciones políticas y gremiales.
En agosto del año pasado, el Presidente encabezó el acto de firma del Acuerdo Federal de la Hidrovía Paraguay-Paraná, junto a los gobernadores de Buenos Aires, Corrientes, Chaco, Entre Ríos, Formosa, Misiones, y Santa Fe. «Ha llegado la hora de que la Argentina crezca con otra lógica, que crezca con otro equilibrio y que el desarrollo no solo esté concentrado allí en el puerto de Buenos Aires. Queremos que el desarrollo se distribuya en cada lugar de este país tan querido», señaló el mandatario, quien volvió a definirse como «el más federal de los porteños».
“Acercar el poder al interior del país y que Dios no atienda solo en Buenos Aires; que Dios esté en todas partes y atienda allí donde lo están necesitando tantos con-provincianos que quieren como nosotros hacer crecer el país y poner el país de pie y ponerlo en marcha nuevamente», dijo Alberto Fernández.
“Actualmente la función de hidrovia se reduce, como señala el investigador del CONICET Sebastián Gomez Lende, a lo que de antaño cumplía el ferrocarril durante el modelo agroexportador de 1880 a 1930. Es la consagración de un modelo extractivista; modelo que se impuso a espaldas de la democracia y es la causa de la actual situación de desastre en que vivimos, endeudamiento externo y más de la mitad de la población en la pobreza”, remarcó Gallo.
“El modelo de agro exportación de commodities impuesto durante el menemismo y mantenido hasta el presente, ha logrado devastar nuestros ecosistemas, empobrecernos y relegarnos a una categoría de país que sufre enclaves de colonialidad”, remarcó Gallo.
“Ni siquiera hemos sabido aprovechar en la funcionalidad y en los propósitos que se le atribuían, la incapacidad de control del Estado argentino sobre sus exportaciones de soja y el modo en que una parte significativa del poroto se va con bandera paraguaya sin pagar retenciones. Produciendo un extraño fenómeno, conforme lo indico el Senador Taiana, ‘Paraguay exporta más soja de la que produce’”.
“Otra buena parte de nuestra producción de soja sale por el puerto uruguayo de Nueva Palmira y tampoco paga retenciones”, indicó.
“De todos modos, la parte que paga retenciones no es controlada por el Estado y dependemos de las declaraciones juradas de las corporaciones y de los exportadores. La concesionaria cobra un peaje de 3 dólares por tonelada, ejerciendo un poder de policía que fue delegado con dudosa constitucionalidad”, manifestó el edil.
“Es así que el productor, acopiador, exportador cuando se le compra el poroto al sojero se le descuenta las retenciones que dejan de ser entonces un tributo a las exportaciones para convertirse en un impuesto más, pero manejado por las empresas privadas.”
“Hay otro tema no menor con respecto a la falta de control sobre los cargamentos, Argentina es considerada como principal emisor de cocaína de América Latina, por países como Alemania. Para ser más claros, en febrero de este año se descubrieron 16 toneladas de cocaína escondidas en tarros de pintura”, indicò.
