Las modificaciones comenzaron a regir a partir del 1º de septiembre y no sólo alcanzan a Concordia sino también a Chajarí y Federal. Ya no existen más los cuatro Juzgados de Instrucción que históricamente funcionaron en Tribunales. De ahora en más son reemplazados por los fiscales deberán llevar adelante la investigación y serán los encargados de llevar adelante la acusación en el juicio, si el caso llega a esa instancia.
Antes, el juez y el fiscal de instrucción llevaban adelante el caso pero cuando llegaba la parte del juicio oral era el fiscal de Cámara el que estaba encargado de argumentar delante del jurado. “Por ahí se encontraba con un delito que no había investigado el mismo. Esto traía problemas”, dijo Mautone.
De ahora en más, los fiscales son los responsables de la investigación y tienen que estar en el lugar del hecho cuando se comete el delito. “Es el que recaba la prueba; tiene que dar las instrucciones de que es lo que se debe hacer y que no; tomar las testimoniales que el considere pertinentes de la gente que encuentre en el lugar”, señaló.
La Policía, que es la que primero llega al lugar del hecho, ahora tiene 24 horas para notificar al fiscal. En realidad el Código establece 12 horas pero se amplió a 24. Antes la Policía tenía 20 días para elevar la instrucción al fiscal.
A diferencia del sistema antiguo, ahora el fiscal ahora puede archivar las causas por decisión propia. “Cuando no tienen pruebas, no se vio al delincuente, la puede archivar siempre y cuando corra vista a la parte ofendida. Esta parte se puede negar y ahí se corre vista al procurador de la provincia y ahí se verá si se la deriva a otro fiscal o la archiva”, detalló Mautone.
La tarea de los fiscales serán controlados por el Juez de Garantías. “Únicamente se va a abocar a juzgar y no va estar involucrado en la investigación. Verá que se cumpla el debido proceso; las normas de legalidad; que no se viole ninguna ley. Es el contralor de la investigación”, señaló.
Si embargo, la innovación en los procedimientos está generando algunos problemas en la aplicación. “Todo el mundo se ha mostrado con optimismo por todo lo que cambia pero como es medio avanzado la estructura de Concordia no está preparada y la gente del poder Judicial andan un poco a las corridas para poner en movimiento todo esto”, dijo el titular del Colegio. “No es tan sencillo, como todo cambio cuesta”, explicó Mautone.
La estructura contempla ocho fiscales, un juez de garantías, José Costa, y un juez de transición para adecuar las causas viejas al nuevo proceso. No obstante, falta la designación de algunos de los fiscales. Incluso, se amplió la cantidad de jueces de la Cámara Penal de tres (antes estaban las magistrados Mariela Rojas, Alicia León y Patricia Pérez) a cinco pero Mautone desconocía quienes la integran. Mautone dijo que creía que los nombramientos que faltan serán incluidos en una acordada del Superior Tribunal de Justicia que saldrá mañana. “Mañana se sabe como van a ser los nombramientos y demás”, agregó.
Además no están organizadas aún las oficinas que corresponden a los funcionarios que deben ejercer las nuevas funciones. “Se están organizando de una manera que, pobre gente, están tratando de hacer lo posible”, señaló Mautone.