
Desde la ACPC aseguraron que ya estaban en plenas tareas organizativas de la prueba. Intentaron comunicarse en forma inmediata con las autoridades municipales que justamente fueron las que en su momento les aprobaron el protocolo presentado y les dieron todo el apoyo para la realización del mismo.
“La respuesta de ellos fue que ante este decreto que era determinante en su redacción referido a este tipo de realizaciones, se iba a comunicar el intendente Alfredo Francolini con el Gobernador Gustavo Bordet para de alguna manera conseguir alguna excepción y sobretodo teniendo en cuenta el movimiento ya generado con la prueba, con muchos atletas ya en la ciudad alojados, con gente en viaje, con corredores que necesitaban urgente respuesta para programar su venida a Concordia, con una organización que tenía ya prácticamente todo montado para la prueba y solo ajustando detalles finales, con innumerables productos perecederos ya adquiridos, indumentarias, servicios y gente contratada para diversos trabajos, etc, etc.”, indicaron desde la ACPC.
“Esto hizo que la letra fría del decreto quedara supeditada a la intermediación de nuestras autoridades locales y la posibilidad de que ellos pudieran lograr que se aplique simplemente el sentido común y se permita la realización del evento ante una movilización previa semejante y principalmente ante una carrera que se iba a realizar con todos los protocolos existentes y todos los cuidados necesarios, con muchas variantes realizadas al esquema habitual de carrera”, señalaron.
“Habiendo transcurrido el tiempo y habiendo insistido constantemente desde nuestra zona de trabajo en el lago, con llamadas telefónicas durante toda la tarde/noche para obtener la respuesta positiva o negativa de la intermediación, o esperando el prometido llamado para hacernos conocer las novedades del caso, cosa que nunca sucedió, es que hemos optado por no mantener más en la incertidumbre a los corredores, y no seguir esperando en vano una respuesta que nunca llegó, y evitar así más perjuicios de los que ya ha provocado este intempestivo decreto con aplicación de un día para el otro”, señalaron.
“Lógicamente puede estar muy en concordancia tal vez con la situación actual de pandemia, pero que ni siquiera dio la opción de dejar en manos de cada Municipio la potestad de la toma de decisiones ante situaciones particulares como lo era el desarrollo ya en marcha de este evento con tanto movimiento generado y que deja tanto para nuestra ciudad en muchos aspectos”, mencionaron.
“Estamos muy decepcionados como también ustedes seguramente, sabemos de la inversión realizada por ustedes, y de tantas ilusiones y alegría de poder estar nuevamente en la línea de largada de este clásico de la media distancia. Emprendimos un trabajo arduo y responsable con muchos meses de anticipación y esforzándonos en hacer las cosas bien, y con la convicción de que esta prueba podía hacerse y principalmente con el consentimiento y aprobación de quienes debían autorizarnos”, expresaron.
El 14 de abril pasado, la organización dio a conocer que ese día habían mantenido una reunión con el intendente Alfredo Francolini y el responsable del área de Turismo, Aldo Álvarez, junto integrantes del COES local. “En la misma se establecieron las pautas de realización del evento y requerimientos relacionados estrictamente con el protocolo de la misma. Analizados y aprobados todos esos temas, el Municipio de esta ciudad dio la autorización correspondiente para que se lleve a cabo la carrera en el día programado que es el domingo 25 de abril”, señalaban desde la ACPC. No obstante, la situación epidemiológica se complicó aún más y la prueba se suspendió a último momento.
