Andrade se encontró con el cadáver de su tía recostado en un sofá cama. La mujer, según los peritos médicos de la Policía, había fallecido hace 10 o 15 días atrás. Las dos hermanas, de 76 y 81 años, no habían dado aviso a las autoridades o a algún familiar -aunque no tienen ninguno en Concordia- se presume debido a que no tienen el grado de lucidez suficiente o de movilidad. Una de ellas padece el mal de Alzheimer y la otra a duras penas puede caminar.
En total, la mujer fallecida tenía cinco hermanas. Una de ellas vive en Corrientes, la madre de Andrade. Las otras dos en Buenos Aires. Las dos restantes que compartían la misma casa en el barrio Nébel fueron llevadas esta tarde al Asilo de Ancianos debido a lo sucedido.