La investigación, según se supo, comenzó con la denuncia de una joven de 15 años, quien dijo que durante el verano fue obligada a ejercer la prostitución por un hombre que, en realidad, la había recibido para cuidarla por disposición del Consejo del Menor.
La joven había sido enviada en guarda a la vivienda de calles Borques y Avenida Parque, en el barrio Munilla, a cargo de Sergio Miguel Gómez, de 34 años, y de María José González. La casa tuvo repercusión pública el pasado 25 de enero, cuando se ahogara en una pileta de natación el pequeño Gastón Ismael Domínguez.
La joven denunció que Sergio Miguel Gómez la obligó a ejercer la prostitución durante todo el verano, y brindó detalles sobre lugares, precios y protagonistas, tras lo cual Pivas dispuso en el mayor de los hermetismos el secuestro del hombre, que ya tiene antecedentes penales.
Pivas acusa a Gómez de “promotor de la prostitución”, delito agravado por el hecho de que él había recibido en guarda a la menor.
En la misma vivienda del barrio Munilla se detuvo esta madrugada a Rosa García, de 46 años, por promoción calificada de la prostitución y rufianería, a su hija Rosa Pereyra, de 26 años, acusada por los mismos delitos y además por el homicidio del bebé, y a María José González, que fue detenida en la mañana de hoy, en este caso por encubrimiento de la muerte de su propio hijo.
También se ordenó la detención, en calle Perón al sur, de un hombre de 77 años, por supuesta corrupción de menores, ya que le habría pagado a Valeria para que se prostituyera.