La entidad señaló que se pueden dictar normas o iniciar gestiones para atender la suspensión de distintas actividades comerciales y la caída por 30 días de la actividad turística en el pico de la temporada termal, como sus repercusiones al conjunto de la sociedad.
Las solicitudes están basadas en los “enormes perjuicios que acarrearía la no generación de recursos, mientras las entidades bancarias continúan con el clearing, intereses por descubierto, cobro de créditos, tarjetas, etc”.
Desde la UEPER se manifestaron dispuestos a colaborar en los trámites y aguardan la posible designación de una fecha de audiencia “donde poder encontrar propuestas y consensos”.
