La carta enviada a DIARIO JUNIO continúa detallando que “tras el pomposo título de elecciones internas abiertas, simultáneas y obligatorias, el oficialismo pretende reforzar el sistema clientelar apoyado en caciques territoriales que administran votos y bolsones. Se intenta también excluir a las fuerzas políticas emergentes, entrometiéndose en la vida interna de los partidos con una serie de intrincados requisitos de imposible cumplimiento. Y como si esto fuera poco, se elimina la posibilidad de alianzas entre partidos políticos, al negar el derecho de cada fuerza a elegir los candidatos con que va a participar en una alianza, concertación o frente electoral. Si este proyecto avanza sólo se podrán hacer alianzas entre líneas internas de los partidos, lo que es un verdadero absurdo”.
También reprocha que “la falta de seriedad con que algunos manejaron la supuesta reforma política como moneda de cambio para apoyar la reforma de la Constitución con reelección, deja en pie también la burla que supone presentar a la ciudadanía como fin de la lista sábana un mecanismo que no altera en nada la manera actual de votar y que solo permitiría distinguir mejor los tramos nacional, provincial y municipal de la elección. Nosotros creemos que de verdad debemos poner fin a lista sábana, adoptando el voto uninominal, proporcional y por distrito único para elegir diputados y concejales, tal y como lo tiene en vigencia Brasil”.
Agrega que “esta supuesta reforma tampoco incluye la participación equivalente de géneros o algún otro tipo de cupo femenino para integrar la Cámara de Diputados, a pesar de existir proyectos en este sentido tanto de la Diputada Lucy Grimalt como del mismo Gobernador de la Provincia”.
Por último subraya que “una reforma política es necesaria pero no debe concebirse como improvisada fachada para lograr el objetivo real del oficialismo que no es otro que la reelección de Busti. Una reforma política -al contrario de la proyectada que refuerza el control de los aparatos partidarios- debe servir para facilitar la participación como candidatos a cargos electivos de ciudadanos honestos, y debe permitir que la gente vote a quien entiende son los mejores candidatos sin verse obligada a apoyar a quien no desea. Una verdadera reforma política supone rechazar el despacho del PJ y discutir en serio mecanismos que aumenten la democracia, la transparencia y la participación ciudadana”.
