Lo llamativo y preocupante es que esos llamados tenían lugar en un programa “El Expreso”, que se emite a la noche y es ciento por ciento musical. Es decir, no es un programa que va creando un clima de debate sobre temas de interés, no, el teléfono abierto es para que los oyentes elijan su tema musical.
Así, los oyentes pedían un “temita” y, de paso, cañazo contra los argentinos. Los mensajes no desplegaban agresividad contra los gobiernos argentino o entrerriano, no, los destinatarios éramos nosotros.
Oyentes que, difícilmente estuvieran al tanto de lo que había ocurrido en Gualeguaychú, porque fue casi coetáneamente. Tampoco los ciudadanos de Gualeguaychú que agredieron a colegas uruguayos sabían de esto. Es decir, se está generando una situación peligrosísima sobre la que YA, habría que hacer algo.
Es fin, como lo dijimos en una oportunidad en DIARIOJUNIO, tan mal se manejó esta situación desde el punto de vista político, que pueden ocurrir cosas (como esta) que ni Ray Bradbury podría haber imaginado : ¿ Uruguayos y Entrerrianos enemistados ? increíble.