El abogado querellante había solicitado «la inmediata detención» del cura por «entorpecimiento» del proceso judicial, ya que «sabiendo que venía a ser detenido, una vez más intentó evitarlo» con la presentación de las recusaciones y el pedido de nulidad de la audiencia, lo que retrasó la cita convocada en primera instancia para las 13.
Gallego agregó que «las víctimas no pueden rehacer sus vidas porque hace once años están tolerando a un sujeto que una y otra vez elude el accionar de la justicia». «Este proceso tiene que tener un final y es la detención de Grassi», había advertido.
Grassi, por su parte, había denunciado que «me armaron una causa con testigos protegidos y acusaciones falsos». Además, denunció al fiscal Alejandro Varela. «Cumplí estrictamente las reglas. Pasaron vergüenza diciendo que yo me había vestido de Papá Noel para ingresar a la Fundación (Felices los Niños). ¿Cómo puede ser que un fiscal mienta tanto?», manifestó.
