La represión fue encabezada por el Jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad de la Nación, Pablo Nocetti, enviado especialmente para la ocasión. Este nuevo operativo fue ordenado por el juez Guido Otranto por supuestos cortes de ruta que iban a realizar integrantes de la comunidad mapuche que recuperó esas tierras de manos del empresario italiano Luciano Benetton.
“El 1 de agosto se llevó adelante un operativo a cargo de Gendarmería Nacional en el territorio de la comunidad Lof en Resistencia Depto. Cushamen, en Esquel, con un despliegue represivo inusitado. Más de 100 agentes, fuertemente armados dispararon balas contra los miembros de la comunidad, golpearon a niñxs y mujeres, además de destrozar, quemar sus pertenencias y sus rukas”, denunció Elizabeth Gómez Alcorta, abogada de Jones Huala.
Según relató Gómez Alcorta en un comunicado, el día anterior al operativo había llegado a la comunidad Santiago Maldonado, quien se quedó a dormir y se encontraba presente en el momento de la represión.
“Varios de los integrantes de la comunidad lo vieron correr en el momento en que los gendarmes comenzaron a disparar. Luego, escucharon la voz de un gendarme refiriéndose a una persona que estaba detenida y pudieron observar que se le propinaba golpes a un joven –al que no se lo pudo identificar desde la distancia-. Posteriormente, observaron que una camioneta de Gendarmería se retiró por la ruta camino a Esquel. Ello sucedió cerca de las 13.30. De los miembros de la comunidad, ninguno fue detenido dentro del territorio, ni tampoco fue golpeado. Desde aquel momento no se ha podido dar con el paradero de Santiago – nacido el 25 de julio de 1989 y titular del DNI 34.589.722- quien se encontraba viviendo en El Bolsón”, señaló la abogada.
La comunidad realizó un intenso rastrillaje en la zona, realizó averiguaciones en diferentes dependencias policiales y de gendarmería y presentó varios habeas corpus en su favor.
