Galimberti manifestó que se reunió con el COES (Comité de Emergencia Sanitario) el lunes pasado. El último encuentro del que participó fue el 17 de julio pasado. “Recibimos algunas críticas desde el hospital hacia nosotros para que implementemos algunas tareas como el contralor de algunas actividades”, recalcó en diálogo con Tarea Fina (Radio Ciudadana – FM 89.7).
“Nosotros planteamos algunas deficiencias que estamos viendo del manejo de la salud pública”, sostuvo. Por un lado, remarcó la tardanza en darse a conocer los resultados. Por el otro, deficiencias en el control de las personas que deben estar aisladas por sus contactos con casos positivos como de algunos médicos.
Por otra parte, sostuvo que en un aserradero –actividad declarada como esencial- de la zona, a partir de un caso positivo, se contagiaron 20 personas. Y se encuentran con dificultades para que se establezca un anillo de contención que impida que se sigan diseminando. “Me parece que en esto tenemos que mejorar, se lo dije claramente a la ministra de Salud cuando hable”, mencionó.
Por ese motivo, desde el municipio ofrecieron dinero para hacer un convenio con los bioquímicos de la ciudad a los fines de que los laboratorios privados se encarguen de los análisis. “Nos parece fundamental, si queremos cortar esto, avanzar”, dijo. Y también para la contratación de personal dado que les dijeron que el recurso humano estaba agotado. Y para el control de los vecinos que deben estar aislados. “Hay prácticamente 70 domicilios que hay que ir a controlar que estén haciendo aislamiento”, indicó. Además ofreció lugares para instalar más camas de aislamiento.
El otro punto crítico es la falta de camas para pacientes críticos y moderados. Galimberti dijo que una ciudad con 50.000 habitantes, y toda la zona circundante, tiene seis camas para pacientes moderados. “Se anunció la terapia intermedia y todavía no está hecha”, fustigó. Y criticó que hayan transcurrido siete meses desde el inicio de la pandemia sin que se haya invertido seriamente en el hospital. No tiene terapia intensiva ni respiradores.
Más adelante, el intendente dijo que seguir criticando a los jóvenes por la decisión de salir a festejar a la calle el Día del Estudiante, hecho que tuvo repercusión a nivel nacional, es estigmatizarlos. “Parece que los contagios vienen de los gurises, de la juntada de la secundaria, cuando la verdad es que no tenemos datos objetivos que digan que los 70 contagios que tenemos activos vinieron de ahí”, indicó. No obstante, admitió que violaron el Decreto de Necesidad y Urgencia que había admitido el Presidente que instituyó el aislamiento obligatorio para todo el país.
Por el contrario, señaló que tienen datos que los casos se reprodujeron a partir de un aserradero y de fiestas clandestinas de jóvenes. De hecho, remarcó que el mismo fin de semana del 20 de septiembre en que salieron a la calle los estudiantes, hubo tres fiestas clandestinas en las colonias circundantes donde se identificaron a 300 personas. “Varios de esos pibes han llevado al virus a ellos y a sus familias”, dijo. Y añadió que anoche debieron ir a clausurar un cumpleaños de 15 en un barrio. “Más de 60 personas identificadas. Intervino la Justicia Federal”, indicó. Además recalcó que profesionales de la salud reconocieron extraoficialmente que se contagiaron por compartir el mate.
