Ante la difícil situación por la que atraviesa la educación, la dirigente gremial recordó que «hubieron años de destrucción, de fragmentación, que en nombre de modelos y principios capitalistas nos hicieron olvidar de lazos como identidad y respeto por la idiosincrasia de las sociedades», agregando que «el hombre pasó de ser un ser perfectible en todas sus dimensiones a convertirse en un instrumento para la producción y para el trabajo a bajo costo, cuando no un desocupado sin posibilidades».
Furlong precisó que «la tecnología nos robó la práctica de la lectura; la TV nos encapsuló, robándonos las charlas y debates con nuestros hijos, alumnos y amigos».
Por otra parte apuntó que «las prácticas demagógicas de los partidos políticos también contribuyeron» en el actual estado de cosas y deslizó que «lejos de pensar en una educación que contenga a todos», la realidad demuestra que son menores «las posibilidades futuras para quienes fueron abandonados de antemano» por el sistema.
«Pero aún así nuestros alumnos se destacan en encuentros y ferias, se preocupan por la ecología, juntan pilas, reciclan plásticos, cuidan las palomas, etc., tratando de enmendar daños que los ´dueños del mundo´ se encargan aplicar», explicó.
Finalmente la dirigente sintetizó la actualidad diciendo: «Los docentes nos encontramos con bajos salarios que están muy lejos de cubrir la canasta familiar básica; sin prestaciones normales y suficientes por parte de la obra social; sin capacitación en servicios y trabajando y luchando continuamente para que los responsables de cubrir necesidades básicas de los establecimientos educativos no se hagan los distraídos».
Irma Noe : Directora Departamental de Escuelas de Federación :
“La situación de la educación entrerriana dista de ser la óptima. Los salarios de los docentes de Entre Ríos se ubican entre los cuatro peores del país. El docente, que alguna vez fue una personalidad dentro de la sociedad, se ha ido transformando con el tiempo y las crisis en un trabajador que debe luchar permanentemente por sus derechos y su subsistencia. Esto, por supuesto, no es una excepción en el país que nos toca vivir.
Sin desconocer las dificultades que impone la hora actual, la Directora Departamental de Escuelas, Irma Noé, indicó que «está en cada uno valorizarse», agregando que «aún hoy muchos maestros que son consultados por los padres de los alumnos, incluso ante problemas personales, siendo muy valorados en la sociedad».
«El rol del maestro es formar una persona y por ello debe instruir y educar y a esto lo sabemos quienes optamos por seguir esta profesión», apuntó.
«Esto es vocación y ser maestro significa formar, no sólo dedicarse a lo pedagógico, ya que el ser humano es una integralidad y no podemos separar la mente del chico de su cuerpo y sus sentimientos, por eso cuando tenemos un alumno frente a nosotros, debemos tomarlo entero, como él es», dijo.
«Nosotros debemos dejar fuera del aula nuestros problemas y, aunque esto pueda parecer que no es fácil, se puede hacer», acotó la funcionaria, al tiempo que destacó que «yo sé que el sueldo es bajo, pero muchas veces las compensaciones que uno tiene como maestro no pasan por el salario. Cuando uno logra que la criatura le tenga confianza y quizás le cuente cosas que tiene muy escondidas en su corazoncito, llegan las gratificaciones para los maestros. Cuando uno puede hacer algo para sacar a ese chico del pozo en el que puede estar en algún momento, llega esa gratificación a la que me refiero. Se que a muchos podrá molestar esto, pero es lo que yo siento: el único incentivo para los maestros no debe ser el sueldo».
Admitió que «hay muchas cosas para mejorar en la educación, más allá de los salarios» y se refirió a cursos de capacitación, tecnología, infraestructura.
Por otra parte se refirió al trabajo de los padres, considerando que «deben acompañar a sus hijos e incluso poner los límites necesarios para su formación. El maestro, solo, no puede hacer todo el trabajo».
