No tienen cómo pagar alquiler, y a gatas sobreviven con lo que venden. “Vivimos de vender cosas, y de la ayuda que algunos nos dan”, dice Edit.
Sergio Lescano, que es vocero de los exempleados del Hotel Alvear, llegó para dar apoyo a la familia que decidió buscar cobijo en el lugar. Y contó que quienes ejercen como dueños de los despojos del establecimiento hotelero que se ubica sobre la Peatonal San Martín, están llevándose todo cuanto han podido.
Nombra a un regente que estaría ejerciendo como titular de la firma, Nicolás Martínez, quien se estaría llevando todo.
“Vino a buscar una heladera que era del hotel. Pero esa heladera es la que estaban usando los chicos para guardar las cosas que tienen para vivir.
Se vinieron anoche (por el martes) porque se quedaron sin lugar adonde vivir. Estaban alquilando, y no tienen plata”, cuenta Lescano.
“Están vendiendo todo todo: muebles, colchones, heladeras, somiers, heladeras, televisores, aires acondicionados”, dicen los empleados. Lo sacan por una playa de estacionamiento mínima que da a calle Corrientes y Rosario del Tala. Es un ingreso al sector de más reciente construcción del Hotel Alvear. Tiene otros dos accesos: sobre Peatonal San Martín y también sobre calle La Paz.
Fernando y Edit tienen resuelto quedarse en el hotel, a vivir en el hotel, hasta que encuentren una solución.
El matrimonio cuenta que han procurado sustento, y han acudido a las áreas de Desarrollo Social de Provincia y Municipio, pero que en ningún lado han encontrado acogida.
Buscan empleo, aseguran, y no consiguen. Buscan ayuda estatal, y tampoco. De momento, permanecerán en el hotel, detrás de ese portón de hierro que separa la propiedad privada de la calle.
Anoche, mientras los extrabajadores hacían el aguante a la familia que se intrusó, no había aparecido ningún dirigente de Utgra.
Ahora, con el hotel cerrado, los empleados sin haber podido cobrar sus salarios, y con el drama de una familia sin lugar donde vivir, los extrabajadores aguardan la aparición del responsable de todo, Ricardo Rabadan Paz, quien fungió como titular de la firma que dejó sin trabajo a 14 empleados.
