En este diálogo Rouger dijo que se enteró por la radio que había un niño durmiendo en la calle. Con respecto al chico que se encontró hoy durmiendo en calle Tucumán ya varias veces lo hemos sacado del lugar y lo hemos entregado a su familia que lo cobijó pero él se escapa, se va, habla con los psicólogos y les dice que el lugar de pertenencia de él, es la calle, que él quiere estar en la calle. Es un chico que no está escolarizado, las veces que lo encontramos en la misma calle hemos tomado medidas y ahora vamos a hacer lo mismo cuando llegue el comando, seguramente lo vamos a llevar al Juan XXIII.
Señaló que tomarán una medida de excepción que consiste en dar aviso a la justicia, al menor lo llevamos por el término de 3 meses a un hogar o residencias y en ese tiempo intentamos que vuelva con su familia. Si el chico sigue en la calle, la medida se puede ampliar por 6 o 9 meses.
Fernando Rouger asegura que anoche estuvieron recorriendo las calles entre las 22 y las 23 hs.
Nosotros siempre decimos que este es un problema social, cultural, anoche salimos con el programa chicos en situación de calle por el intenso frío, a eso de las 22 hs. y nos encontramos en el centro con tres chiquitos que, uno lo llevamos al hogar y al otro a la casa con sus padres. Uno de estos chiquitos estaba en un negocio céntrico que le estaban haciendo hacer mandados. Nosotros insistimos siempre con que no le den plata, que no los hagan trabajar a los chicos. Y esa es la misma gente que después se queja de que pasan frío en la calle.
Rouger mencionó la existencia de las 5 residencias que existen en Concordia. El Juan XXIII donde hay 9 chicos (la cantidad varía) ; la Casa de los Gurises, donde hay entre 12 y 15 niños ; Nueva Vida donde viven casi 50 chicos ; la Residencia para chicas de entre 12 y 15 años, allí viven como 15 chicas y el hogar para niños de 0 a 7 años, Bíblico Belén.
El titular del COPNAF aseguró que de los 60 chicos en situación de calle que había hace casi un año, ahora solo quedan 10. Asimismo explicó cómo fueron sacando a esos chicos de la calle, contó por ejemplo el caso de una mujer que había en la plaza 25 que todos creían que hacía trabajar a los hijos pero en realidad ella les cuidaba las mochilas. Cuando nosotros le explicamos la situación dejó de ayudarlos y logramos resolver esa situación.
Repetimos, nosotros insistimos que no les den dinero, que no los ayuden, que nos avisen, somos nosotros los encargados de hacer esta tarea y necesitamos el apoyo de la comunidad que consiste precisamente en avisarnos.